El pasado domingo el Club Ciclista Oscense dio comienzo a la temporada de Ciclocross 2017-2018 participando en el ‘III Ciclocross Villa de Guissona’, primera prueba puntuable para la Copa Catalana, además del Ranking de la Real Federación Española de Ciclismo al tratarse de una prueba de clase 1.33.5.
Estas pruebas constan de circuitos cerrados en los que hay varios obstáculos como tablones que se deben saltar, escaleras, tramos de arena suelta o barro y rampas con pendientes casi imposibles de superar sobre la bicicleta. En esta ocasión, el circuito tenía una longitud de 2.5 kilómetros al que los corredores debían dar vueltas durante la hora que duró la prueba. Las escasas lluvias hicieron que los tramos de tierra estuvieran muy secos y los corredores rodasen muy rápido, completando la vuelta en apenas 6 minutos y 30 segundos.
Miguel Bergua, corredor del Supermercados Alto Aragón, se plantaba en la línea de salida con muchas ganas e ilusiones puestas para esta temporada, a la que llega con mejor preparación que la pasada campaña, hecho que se vio reflejado en el rendimiento durante toda la prueba y el resultado final, concluyendo en un meritorio 18º puesto élite.
Por su parte, Blas Chéliz, del Vive Inmuebles, debutaba en esta modalidad y en la nueva categoría -Junior-, mostrando un gran manejo de la bicicleta, dando destellos en los puntos más técnicos del circuito. Logró hacerse con la 7ª posición pese a ser uno de los corredores más jóvenes.
También participaron Pablo Ara, que se vio obligado a abandonar a causa de un fuerte golpe en la rodilla, y Juan Argudo, quien se clasificó 3º en categoría master 60.