Llega la nieve. Y lo hace con fuerza. Las estaciones de esquí alpino y de fondo ultiman todo para el inicio de la temporada 2017/18. Toca trabajar en la limpieza de los accesos y en el caso del nórdico en abrir huella. Ya hay quien ha inmortalizado el inicio de la temporada. Los amantes de la travesía no han podido frenar el ímpetu. Se fiaron de los partes, pusieron alguna vela de paso para que no fallaran, y ya han hecho las primeras excusiones.
El Espacio Nórdico de Llanos del Hospital ha sido el primero que ha empezado a pisar sus pistas pudiendo comprobar la gran cantidad de nieve que ha caído en estos dos últimos días. Esta misma mañana, desde Llanos se levantaban con otros 30 centímetros más acumulados de nieve, que ha obligado a sacar las máquinas para limpiar los accesos.
La Asociación de Espacios Nórdicos de Aragón surgió en 2010 con el objetivo de impulsar los diferentes Espacios Nórdicos de Aragón y desarrollar este sector por dos vías, la turística y la deportiva. Pretende ser una entidad estable que consiga reivindicar estos centros invernales dentro del sector de la nieve en Aragón. El cambio de denominación de “circuitos de fondo” a “espacios nórdicos” resume la evolución y las posibilidades de estas áreas: desde las cada vez más populares raquetas, hasta la práctica del esquí de backcountry, descenso en trineos, escalada en hielo, ascensos, trineos de perros o fabricación de iglús.
Los 9 espacios nórdicos de Aragón tienen 30 pistas que suman 100 kilómetros. Los espacios adheridos a la asociación son: Espacio Nórdico de Linza, Espacio Nórdico de Lizara, Espacio Nórdico de Oza-Gabardito, Espacio Nórdico del Balneario de Panticosa, Espacio Nórdico de Pineta, Espacio Nórdico de Llanos del Hospital, Espacio Nórdico de La Muela, Espacio Nórdico de Candanchú y Espacio Nórdico de Fanlo.