Miguel Loureiro dejó el Huesca tras pedir su salida al conocer el interés del Deportivo. Aunque el traspaso no fue sencillo, hoy es indiscutible en la defensa gallega y pieza clave para Antonio Hidalgo. En El Alcoraz aún se debate si su venta fue un acierto, especialmente tras perder a uno de los líderes del vestuario.
HUESCA | Miguel Loureiro fue todo un espía del Deportivo durante la pretemporada del Huesca. El gallego estuvo presente en las primeras consignas del equipo de Guilló durante la pretemporada. El futbolista sabía del interés del equipo de La Coruña desde el inicio de la pretemporada y fue al club oscense suplicando su salida. Finalmente lo consiguió, aunque el club oscense no se lo puso fácil y ahora triunfa junto a Antonio Hidalgo en el equipo coruñés.
Loureiro lo ha jugado todo. Acumula 450 minutos en el costado derecho de la defensa gallega. Todo un seguro para el Dépor. Es el décimo jugador que más pases da de la categoría (276), que demuestran lo importante que es para el ex entrenador azulgrana. Un fichaje que Hidalgo sabía que iba a tener efecto inmediato. Loureiro por su lado consiguió cumplir un sueño. En Huesca no piensan lo mismo, ya que pocos entienden su traspaso. Todavía no se conocen datos oficiales sobre su traspaso, pero en El Alcoraz se dieron por contentos con su venta.
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Los sustitutos de Loureiro en el Huesca
En el Huesca su salida la cubrieron con las llegadas de Carrillo y de Hugo Pérez. Ninguno de los dos llegan a las expectativas que había generado Loureiro, pero tampoco hay muchos aficionados echando de menos al gallego de 28 años. Lo que si que perdió el grupo es el liderazgo de Loureiro. Era el tercer capitán, por detrás de Pulido y Sielva. Un futbolista que se ganó el cariño de sus compañeros y de la grada. Una pérdida que la plantilla ha sabido cubrir tirando de la veteranía de futbolistas como Sergi Enrich, Dani Jiménez o Iker Kortajarena.
