Es complicado elegir al mejor jugador de tu equipo después de un partido insulso, donde el rival manejó los tempos del juego y al final se llevó los tres puntos con un cruel gol a falta de diez minutos para el final. El Sevilla marcó la diferencia con la calidad que atesora, Míchel no supo sacar lo mejor de los suyos. Aún así, hubo un jugador que volvió a brillar con luz propia en medio de una niebla de dudas en la que el equipo ha sucumbido. Galán es la muestra de que todavía hay esperanza en la SD Huesca.
Nadie dudaba de la calidad del extremeño, incluso se criticaba su suplencia en los últimos años. Sin embargo, quién hubiese imaginado que Javi Galán se iba a convertir en una pieza tan indispensable y determinante en las filas azulgranas. Sus intermitentes apariciones en las dos temporadas pasadas le impidieron demostrar todo su potencial; ahora, con la lección aprendida de Primera y habiendo adquirido una amplia experiencia en Segunda, aquel jugador que llegó del Córdoba es muy diferente al actual.
Un Galán muy mejorado
En primer lugar por el criterio que muestra cuando tiene el balón en el pie. No se descubre nada nuevo al decir que el lateral tiene una capacidad ofensiva notable, pero si en algo flojeaba era en la selección de dichas incisiones en el ataque. En pasadas campañas, Galán pecaba en muchas ocasiones de galopar por la banda sin un objetivo concreto, con las anteojeras puestas que le impedían ver a sus compañeros. El resultado, en muchas jugadas, era que el balón acababa o en saque de puerta o en un centro a tierra de nadie.
Sin embargo, este año se ha visto una evolución más que palpable en este aspecto. El extremeño se ayuda constantemente de Ferreiro -o el extremo por el que opte Míchel- para subir el balón con mayor criterio y apoyo. Levanta la cabeza, analiza la situación de sus compañeros y, si es necesario, retrasa el balón para reiniciar la jugada.
Galán fue esencial en la salida del balón de la SD Huesca ante la presión del Sevilla. Completó el 70% de sus pases (23 de 33), ganó cinco de los siete duelos que tuvo en defensa y realizó cuatro robos. Volvió a cumplir en la faceta defensiva y volvió a sobresalir en las aportaciones ofensivas, algo de lo que nos tiene más que acostumbrados en los últimos enfrentamientos.
El ídolo de la afición
Los lectores no tuvieron ninguna duda en la encuesta de Tumasa de este fin de semana. Galán fue elegido por un 54,81% de los votos el mejor jugador del encuentro, seguido de Andrés Fernández con un 27,41%. Con este nuevo reconocimiento, el lateral zurdo del conjunto altoaragonés ha conseguido ser el MVP del partido por tercera vez consecutiva. Porque la afición azulgrana reconoce a quien se deja la piel sobre el campo, y porque Javi Galán se ha erigido como el faro que indica el camino correcto que debe tomar esta SD Huesca si quiere revertir esta situación.