ZARAGOZA | El Real Zaragoza acelera en el mercado y está a un paso de contratar a Sinan Bakis. El jugador alemán, de origen turco, ha resuelto la espera a favor del Zaragoza, que le ofrece las dos próximas temporadas y la opción adicional de una tercera. Cordero le proporcionará uno de los mejores sueldos de su plantilla y le encargará la tarea más cotizada de este juego: el gol.
Bakis se convirtió pronto en una revelación en Segunda División. Se adaptó al contexto del Andorra de Eder Sarabia, uno de los proyectos más singulares en la categoría. Fue el punto y final de un equipo empeñado en empezarlo todo bien. Y logró alcanzar los 12 goles en poco más de 2000 minutos de juego, con mucho menos tiempo que los mayores goleadores del curso (Uzuni y Raúl García de Haro).
De explosión tardía, sus registros de este curso son de largo su mejor marca en el fútbol profesional. Formado en el Bayer Leverkusen, desarrolló su carrera en el fútbol turco (Kayserispor y Bursaspor), austriaco (Admira Wacker) y holandés (Heracles). En total, ha marcado 52 goles en su carrera y el Zaragoza espera que las cifras de este año no sean flor de una sola temporada.
Alto y de gran envergadura, con Sarabia ha entendido las claves del juego colectivo. Es un futbolista solidario, capaz de darle aire al equipo y de ganar metros por sí mismo. Generoso en el esfuerzo, coordinado en los espacios reducidos, tiene instinto y un golpeo letal. Lo ha mostrado en el Principado, donde ha logrado ser un goleador feroz dentro de una propuesta delicada.
Cordero apuesta por Bakis para formar una delantera ganadora, en una de las decisiones más estratégicas de las temporadas. El Zaragoza ha fallado en las elecciones de los últimos tres años, por mucho que se encontrara un hallazgo como Giuliano Simeone en el camino. Desde Luis Suárez nadie supera los dobles dígitos en Zaragoza, con Haris Vuckic, Álex Alegría, Toro Fernández o Pape Gueye como exponentes de su fracaso. Si La Romareda siempre fue el hogar de grandes delanteros, se espera que Bakis pueda representar esa tradición y alejarse de los últimos precedentes.
El Zaragoza empezó el mercado con unos principios sólidos: quiso construirse desde atrás. Unas semanas más tarde, Cordero ha encontrado en Bakis al delantero que siempre quiso tener en su plantilla.