HUESCA | Lobe Huesca cumplió con su cometido de vencer en el Multiusos al Cáceres (49-73) y no hizo falta mirar a Azpeitia ni a Huelva para conocer el desenlace de esta última jornada: los de Rafa Sanz jugarán el ansiado playoff de ascenso, terminando en una meritoria sexta plaza.
Merecidísima victoria del conjunto oscense, que fue siempre por delante en el marcador y que, con una extenuante defensa, secó por completo a los atacantes extremeños, dejándolos en solo 49 puntos. El acierto desde la línea de tres fue clave, con los exteriores peñistas masacrando el aro local. Rafa Sanz apostó de inicio por su característico quinteto: Abdulsalam, Shelist, Breacey, Vázquez y Rubín.
El comienzo del encuentro estuvo marcado por el desacierto de ambos equipos. Los nervios pesaban tanto en oscenses como en cacereños, y los fallos eran generalizados. A los locales les costó tres minutos anotar sus primeros puntos. Más acertado arrancó Huesca, con triples de Vázquez y Breacey que situaban el 2-9. Cáceres apretaba en defensa e impedía que Lobe anotase con fluidez, pero el buen hacer de Rodrigo y otro triple de Figueroa mantuvieron la ventaja peñista al final del primer cuarto (11-17).
Rakocevic inauguró el segundo acto con tres tiros libres que acercaron a los suyos a solo tres puntos. La intensidad defensiva del Lobe se mantenía, y los continuos cambios no afectaban al ritmo defensivo. Todo ello provocaba errores constantes en los lanzamientos del equipo de Adrián Alonso. Figueroa y Vázquez siguieron con su recital de triples y la ventaja se estiraba hasta los 9 puntos (20-29). Tras un tiempo muerto, los locales reaccionaron liderados por el jovencísimo base Nico Medina (16 años), que dio mayor velocidad a sus acciones. Abdulsalam se hizo fuerte bajo aros con dos buenas acciones, y se llegó al descanso con 27-33.
Tras la reanudación, el alero Black abrió con un triple lejano, rápidamente respondido por Pablo Marín. Luego llegaron los triples de Vázquez, Breacey y Rodrigo, para un total de cuatro canastas de tres en los primeros cuatro minutos del tercer cuarto, lo que disparó la ventaja hasta los 15 puntos (34-49). Solo Rakocevic era capaz de romper la férrea defensa oscense. Los pívots del Lobe dominaban los rebotes, no permitían segundas oportunidades y alejaban a los locales de cualquier opción real de remontada. Figueroa, sobre la bocina, cerró el cuarto con el marcador en 39-53. Lobe Huesca sabía administrar la ventaja y comenzaba a jugar con el reloj y el resultado a su favor.
Los peñistas seguían de dulce en el último cuarto, anotando con facilidad desde el perímetro o dentro, gracias a Abdulsalam, que sacó a relucir su repertorio de movimientos al poste. Los locales, apáticos y sin chispa, disfrutaban de muchos tiros liberados, pero no lograban anotar. Un triple de Rodrigo a falta de cuatro minutos terminó por romper el partido. Pablo Marín y Rubín de Celis manejaban el juego con cabeza, sin precipitaciones. Con un Cáceres ya sin ideas y fallando casi todo, Rodrigo y Breacey agrandaron la renta hasta el definitivo 49-73.