Míchel en el encuentro frente al Athletic Club. Foto: SD Huesca.
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Salvo milagro, adiós a esta categoría en nuestra segunda visita. Volvemos a no estar a la altura. Una buena plantilla de Segunda -campeona- no alcanza para competir con los equipos de una de las tres ligas más importantes del mundo. Solo uno de los fichajes ha sido titular asiduo en esta casi primera vuelta de la competición: Siovas. Ontiveros va creciendo; Sandro va pareciéndose a sí mismo; Borja, torpe y no quiero seguir la lista.
Muchas decepciones por parte de los “refuerzos“ y demasiadas confirmaciones entre lo que ya había. Eugeni, Insua, Pedro López, Luisinho, Juan Carlos, Ferreiro, Okazaki, Sergio Gómez… jugadores de Segunda, sobrepasados por las circunstancias.
Quiero fijarme en la secretaría técnica: mal, sin más comentarios. O con alguno más: tantos datos no miden el carácter y de eso ha adolecido el equipo esta temporada y la pasada también.
Y por último, Michel. No es solo culpa suya, pero también es cómplice de lo ocurrido. De Vallecas se fue por dignidad. Aquí le ha faltado y habrá que cesarle. Gracias por hacernos campeones en Segunda y buen viaje de vuelta a tu casa en Madrid.
Y otra cosa: día 11 del mercado invernal de fichajes y como vamos tan sobrados de puntos de calidad y de carácter no hay refuerzos a la vista. Todo bien…
