Carlos Alcaraz sigue dejando huella en la temporada 2025. El murciano se ha clasificado este sábado para la final del Masters 1.000 de Cincinnati tras imponerse con solvencia al alemán Alexander Zverev, número 3 del mundo, por 6-4 y 6-3. Su rival en la final será el italiano Jannik Sinner, actual número uno y vigente campeón del torneo, reeditando así una rivalidad que se ha convertido en una de las grandes historias del tenis actual.
La victoria del español, sin embargo, estuvo marcada por las dificultades físicas de Zverev, que llegó mermado al duelo y apenas pudo competir al máximo durante la segunda manga. Pese a ello, Alcaraz mostró solidez, inteligencia táctica y madurez para resolver el partido en una hora y 45 minutos, y así firmar su 53º triunfo del año.
Inicio igualado y golpe al momento justo
El choque entre los dos jugadores con más victorias en 2025 arrancó con igualdad. Ambos defendieron su saque con solvencia hasta el 3-3. Fue entonces cuando Alcaraz aprovechó una breve fisura en el juego del alemán para romperle el servicio y encarrilar el primer set, que cerró por 6-4 tras salvar tres bolas de ‘break’ y mostrar una notable entereza en los momentos de presión.
Con el primer parcial en el bolsillo, el número dos del mundo arrancó el segundo set con fuerza, logrando un nuevo quiebre ante un Zverev visiblemente fatigado, empapado en sudor y con síntomas de mareo, como él mismo comunicó al equipo médico tras pedir atención en pista.
Un rival sin fuerzas y un Alcaraz implacable
Pese a su condición física, Zverev logró recuperar el ‘break’ gracias a cuatro dobles faltas consecutivas de Alcaraz, en el que fue quizás el único momento de desconexión del murciano. Sin embargo, el español reaccionó de inmediato, retomó el control del encuentro y, tras un último esfuerzo del alemán para resistir, cerró el set por 6-3, ganando los dos últimos juegos al resto sin oposición.
Tras el partido, y consciente del contexto especial del triunfo, Alcaraz dejó un mensaje en la cámara:
“Contento por la final, pero triste por Sascha. Le deseo lo mejor.”
Una muestra de respeto hacia un rival que, pese a no estar en plenitud, no restó mérito al triunfo sólido del español.
Rivalidad de alto voltaje: Sinner vs Alcaraz
El próximo lunes, la pista central de Cincinnati será escenario de una nueva batalla entre Carlos Alcaraz y Jannik Sinner, dos jugadores que ya han convertido su duelo en uno de los clásicos más esperados del circuito ATP. La final reedita la que ambos disputaron hace apenas un mes en Wimbledon, donde el italiano se impuso y rompió una racha de tres derrotas consecutivas en finales ante el murciano.
Antes de Londres, Alcaraz se había llevado las últimas tres finales entre ambos: Roland Garros, Roma y Pekín. Ahora, con Sinner liderando el ranking mundial y defendiendo título en Cincinnati, el duelo promete una intensidad máxima y grandes momentos para los aficionados al tenis.
Sinner, firme en su camino a la final
El italiano llegó al último partido tras eliminar sin complicaciones al francés Terence Atmore, una de las sorpresas del torneo. El actual número 136 del ranking, que había protagonizado una semana inolvidable, no pudo frenar la contundencia del número uno, que le venció por 7-6(4) y 6-2.
Con ambos jugadores en un gran momento de forma, la final del Masters 1.000 de Cincinnati se presenta como una nueva página de una rivalidad llamada a marcar una época, al estilo de los grandes duelos históricos del tenis.
Alcaraz, que busca su segundo título en Cincinnati y volver al número uno, tendrá enfrente al rival más exigente posible en estos momentos. Y lo hará con ánimo de revancha y motivación extra tras lo vivido en la hierba londinense.