Que hay alegría en el equipo, sí, faltaría más, pero con control. «El vestuario está contento -dijo- porque los resultados en este inicio invitan al optimismo». Mantiene que el objetivo que persigue el equipo es el que es. Eso sí, no mencionó la palabra permanencia. Este Levitec Huesca despierta buenas sensaciones. Es un equipo que transmite. Y esto le gusta mucho al entrenador asturiano que manifiesta que le encanta “jugar en equipo, ver un bloque”. La realidad es que el alto ritmo de juego de este Peñas descansa, además de en la calidad de muchos de sus jugadores, en que todos son partícipes en los encuentros. En su última cita, contra Cáceres, puso a 12 jugadores sobre el parquet. Y la derivada fue un alto ritmo de juego y, especialmente, entrenamientos de mucha calidad.
Contra Palencia se espera un partido muy duro en su cancha. Se le ha preguntado si dibuja un partido como el ganado en Bilbao y su respuesta ha sido que “hay una calidad parecida”, aunque deslizó que Palencia, en su pabellón, es muy duro. El rival se levanta sobre tres pilares: Otegui, Cvetinovic y Jorge Sanz. Ellos arman el juego de los de Alejandro Martínez. Los dos primeros no son bases, pero da igual. “Son dos jugadores que saben controlar el tiempo del partido, saben moverse muy bien”, señaló Arenas. A Jorge Sanz no se le va a descubrir ahora.
Pero Palencia es más que esos tres jugadores. Así, puso en valor la presencia del escolta Vasturia y el alero Hermanson, que en la pasada jornada contra Oviedo metió tres canastas decisivas para consolidar la victoria de los palentinos que les permite encaramarse a la zona noble de esta LEB Oro.
Arenas tiene en este momento a todos sus jugadores para ser convocados y el equipo partirá el viernes, el mismo día del partido, rumbo a Palencia de donde regresarán nada más acabar. El sábado fiesta y el domingo vuelta a entrenar.