La mejoría de Bada Huesca es evidente. Si se rozó la victoria y, sobre todo el empate contra Bidasoa, nada hace pensar que no se pueda ganar a León. Ignacio Suárez, el central vasco del siete altoaragonés, ve bien al equipo, mucho mejor de lo que dicta ese último puesto. «La pretemporada de invierno nos ha venido bien como grupo y a nivel personal», señala. Jugador eléctrico, de esos que les gusta encarar con independencia de quien esté delante, Suárez subraya que quiere mantener «el ritmo de los dos últimos encuentros».
Un rival complicado
El central reconoció su «irregularidad» en el juego durante la primera vuelta, sin encontrar la razón para entender el porqué de ello. Insistió en la rueda de prensa que el paró le vino bien y los minutos que ofrece sobre el 40×20 son ahora de mucha más calidad. La visión de León le preocupa lo justo. Acotación. Es un rival complicado, difícil, su quinto puesto en la ASOBAL es la mejor tarjeta de presentación, pero es consciente de que todo pasa por lo que proponga el Bada Huesca y lo que haga sobre el parquet. Despejar la incógnita es sencilla: no perder balones porque «León tiene muy buen contraataque» y en ataque seguir en la línea de los dos últimos partidos.
El bilbaíno es consciente de que salir de la última posición requerirá de paciencia. Los rivales directos se tocan con los dedos, pero el equipo es consciente de que hay mucho trecho todavía para pasarlos por lo que, sin duda, requiere de la afición, de su apoyo para contribuir a la salvación.
