ZARAGOZA | El pívot montenegrino Bojan Dubljevic ha sido intervenido quirúngicamente en los últimos días para retirarle el material de osteosíntesis colocado en su mano derecha tras la fractura que sufrió el pasado mes de diciembre durante un encuentro de la FIBA Europe Cup ante el Porto. Aunque su aparición con cabestrillo generó cierta alarma entre los aficionados, el Casademont Zaragoza ha confirmado que la operación estaba prevista y que el jugador estará en condiciones de iniciar la pretemporada.
La lesión de Dubljevic fue una de las más delicadas del pasado curso. Un choque fortuito con la rodilla de un rival provocó la fractura de dos metacarpianos de su mano de tiro, lo que obligó a una intervención quirúngica y a un largo periodo de baja. El montenegrino regresó a las pistas en febrero, pero le costó recuperar sensaciones y confianza. Su ausencia marcó al equipo, que tuvo que reinventarse en la pintura con Sulejmanovic asumiendo roles poco habituales en el puesto de ‘5’ y con la llegada de un Nate Watson que no logró consolidarse.
Todo comenzó con una imagen publicada desde el campus de verano para jóvenes baloncestistas que organiza el propio Dubljevic en Tarihuela. En ella se veía al jugador con la mano vendada y el brazo en cabestrillo, saludando a asistentes y compartiendo momentos con entrenadores como Javier Villaplana, nuevo técnico del Lliria. La instantánea desató la preocupación entre la ‘marea roja’, que temió una recaída en la lesión.
Sin embargo, el club ha salido rápidamente al paso con un comunicado que aclaraba la situación: “La operación forma parte del proceso de evolución del jugador y estará en condiciones de iniciar la pretemporada”. Con este mensaje, el Casademont quiso frenar cualquier tipo de especulación sobre su estado físico y tranquilizar a la afición.
Fundamental para el nuevo proyecto
Bojan Dubljevic aterrizó en Zaragoza el pasado verano tras su paso por el Zenit de San Petersburgo y toda una carrera ligada al Valencia Basket, donde se convirtió en leyenda. Firmó un contrato de dos años con opción a un tercero y su impacto fue inmediato al comienzo, aunque acabó siendo algo difuso, al igual que prácticamente el resto de jugadores.
Su papel será clave en el nuevo proyecto del club aragonés, que a día de hoy solo ha confirmado el fichaje del turco Emir Kabaca y las salidas de jugadores como Mencía, Dimsa y Sulejmanovic, este último rumbo al Unicaja. A la espera de oficializar al nuevo entrenador, Dubljevic se perfila como uno de los pilares sobre los que edificar la plantilla.
Listo para arrancar en agosto
Pese al susto, el pívot estará disponible para comenzar a trabajar con el grupo desde el inicio de la pretemporada, prevista para el mes de agosto. Una gran noticia para Casademont Zaragoza, que necesita construir un bloque competitivo desde la base. La garantía de contar con un referente como Dubljevic en plenitud física es un punto de partida inmejorable.
Su compromiso con el club, reflejado en su presencia en el campus apenas 24 horas después de pasar por el quirófano, es también un indicio del liderazgo que ejerce dentro y fuera de la cancha. La afición puede respirar tranquila: Dubi estará listo para dar guerra una temporada más.