Canfranc, pionera en la lucha antidopaje
Desde 2021, la organización de la Canfranc-Canfranc introdujo controles oficiales WADA en sus pruebas, siguiendo el ejemplo de la prestigiosa Sierre Zinal. Este compromiso se ha mantenido en todas las ediciones internacionales, incluidas las de la Copa del Mundo 2021, 2022 y 2023, así como en el Mundial Máster 2024.
El director de carrera, Álex Varela, recordó: “La Canfranc empezó a aplicar los mismos controles en el mismo año que Sierre Zinal. Lo hicimos porque era lo que había que hacer y lo seguiremos haciendo siempre que podamos”.
Para 2025, además de los habituales análisis de orina, se realizarán controles de sangre, aumentando el rigor médico y garantizando que cada medalla se gane en igualdad de condiciones.
Más premios, más reconocimiento
El campeonato de este año casi dobla la dotación económica respecto al Mundial de Innsbruck 2023, alcanzando los 100.000 euros en metálico. La organización quiere con ello reflejar el crecimiento del trail running y el reconocimiento al esfuerzo de unos atletas que desafían terrenos extremos, condiciones meteorológicas cambiantes y un desnivel físico y mental único.
La corredora sueca Tove Alexandersson simbolizó ese espíritu en la pasada edición de la Maratón Canfranc: tras sufrir una caída que requirió cinco puntos de sutura, regresó a la carrera y acabó en segunda posición absoluta.
Un Mundial de orgullo y honor
Más allá de lo económico, el Mundial CanfrancPirineos 2025 será una cita de orgullo colectivo: corredores que competirán de forma individual, pero representando a sus países en un ambiente donde la camiseta, el himno y la historia pesan tanto como las piernas.
El presidente de la Comisión de Competición de la RFEA, Rodrigo Domínguez, lo resumió así: “El atletismo vive de su credibilidad y el antidopaje es clave para creer en lo que estamos haciendo. Estos controles dan credibilidad a las hazañas que estamos viviendo en la montaña”.