El CB Peñas Huesca La Magia vuelve este miércoles al parquet. Segundo partido de la temporada y lo vuelve a hacer en su casa. Las lluvias deterioraron el pabellón donde juega el Salou así que hubo que invertir la jornada. Y no hay más objetivo que el de ganar. Santi Cerdán, entrenador del Peñas, ha subrayado en rueda de prensa que se pueden hacer mejor las cosas. La premisa es ganar, pero también quiere hacerlo con buen baloncesto. Sabe que su equipo sigue en construcción y pide máxima exigencia a su tropa. No le gustó el final contra el Cartagena, no le gustaron algunos entrenamientos y es consciente, ha dicho, que «a la larga se nota el trabajo diario».
Esta exigencia la traslada a sus chicos. Y el mensaje cala. «El equipo entrenó ayer como debe hacerlo y espero que hoy también lo haga así. Este es el camino a seguir», ha insistido. Volver a jugar en casa tras una victoria tiene una lectura de más calado que la de conseguir la victoria. Es una oportunidad para seguir «enganchando a la gente y las victorias siempre animan a ello», ha recalcado.
El rival de este miércoles, Salou, es un recién ascendido de la EBA. Estrenó la categoría con una derrota contra el Mollet (85-68). Cerdán subraya que siempre estuvo en el partido por lo que «compitió de principio a fin». Los parciales fueron 21-17, 22-14, 24-19 y 18-18 por lo que no quiere un mínimo de relajación de su equipo y, sobre todo, elevar los porcentajes de acierto desde el exterior.
El CB Peñas se presenta este miércoles con la duda del escolta German Kasanzi y Lucas N’Guessan como MVP en la primera jornada. Ha sido cuestionado por ese reconocimiento y cómo puede influir en el rival. Cerdán ha sido claro: «Fue determinante, pero hubo muchas situaciones de tiros abiertos que no estuvieron a nuestro favor. Lo que pido es más acierto porque eso liberará espacios para Lucas». Y es que no hay mejor receta que un partido de acierto en todas las posiciones para sumar una nueva victoria y más aficionados al Palacio.