Inicio fulgurante y dominio defensivo
España salió al parqué con máxima intensidad, abriendo el partido con un parcial de 12-0 que dejó a Eslovenia más de siete minutos sin anotar. La defensa fue el principal argumento del equipo, aunque en ataque no logró transformar esa superioridad en una renta mayor. El primer cuarto terminó con un ajustado 13-6, dejando la sensación de que el partido no estaba ni mucho menos sentenciado.
La reacción eslovena y el paso al frente de Valenzuela
El segundo cuarto fue mucho más igualado. Eslovenia redujo la diferencia hasta colocarse a tres puntos, pero ahí emergió la figura de Paula Valenzuela, que asumió el liderazgo ofensivo para devolver a España una ventaja de diez puntos. Al descanso, la diferencia se redujo a 8 puntos, dejando todo abierto para la segunda mitad.
Lostal, clave en el momento más complicado
Tras el descanso, Eslovenia volvió a apretar y se situó a tan solo tres puntos. España sufría para encontrar fluidez en ataque, pero en ese tramo apareció la garra de Claudia Lostal, que aportó rebotes ofensivos y puntos importantes para mantener al equipo por delante. Aunque cometió una falta que permitió a Kisovec anotar tres tiros libres y devolver la emoción al choque, su peso en la pintura fue fundamental para que el combinado nacional resistiera hasta el último cuarto.
Sentencia en el tramo final
En el último periodo España sacó a relucir su mejor versión. La defensa volvió a imponerse y dejó a Eslovenia en tan solo 8 puntos en todo el cuarto. En ataque, Isabel Hernández fue determinante con dos triples en momentos clave, que junto al trabajo coral del grupo y el dominio interior de Lostal, ampliaron la renta hasta los 15 puntos finales (62-47).
Un oro con sabor a futuro
La victoria otorga a España un nuevo título continental y confirma el potencial de una generación que ya ha dado un paso al frente en el panorama europeo. Para Claudia Lostal, el oro supone un reconocimiento a su esfuerzo y constancia, consolidándola como una de las referencias interiores del equipo.