Como en El Alcoraz, el partido en Lugo se disputó bajo una intensa lluvia y sobre un césped pesado aunque, a diferencia de en Huesca, practicable para la disputa de un partido de fútbol. Ambos equipos trataron de sobreponerse al estado del terreno de juego y pretendieron elaborar a partir del esférico para crear peligro. El Córdoba no arrancó del todo mal, poniendo en apuros a los locales y pudiendo adelantarse en un remate de Markovic, pero a partir de ahí el conjunto lucense fue quien creó el peligro.
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Calavera lo intentó en un saque de esquina aunque cabeceó desviado y Fede Vico, que debutaba como nuevo jugador del Lugo y suplía la baja de Alfonso Pedraza (ya en el Leeds United) en la banda izquierda, fue quien le causó la mayor parte de los problemas a los de Carrión. En esas fue Joselu Moreno quien, en el minuto 40, probó fortuna con un disparo lejano que, tras tocar en un defensor, se coló en la meta defendida por Kieszek. Una ocasión que no parecía peligrosa pero que se tornó fatal tras un balón que se envenenó.
Todavía pudo el Lugo aumentar su ventaja pero desaprovechó sus oportunidades, con un balón al poste y otro al larguero después de que Cisma estuviese apunto de lograr la igualada. El partido no se cerró, lo que le permitió al Córdoba seguir con esperanzas hasta el pitido final. Sin embargo, Guille Donoso, tras una gran jugada personal, no acertó a rematar y el conjunto cordobesista, que no gana desde el pasado 17 de diciembre (1-2 en Oviedo), se quedó de nuevo sin premio.
