En la presentación oficial de Cristian Salvador como jugador del Huesca, el director deportivo, Rubén García, atornilló algunas cuestiones clave de la estructura del equipo de Nacho Ambriz. La primera es la polivalencia. El fútbol cambia y orilla los puestos específicos. Tiende hacia el jugador «mixto», tal como lo definió Rubén García. Y en ese engranaje, el medio centro zamorano se adapta como un guante a lo que se persigue: jugadores capaces de adaptarse a varios puestos. Por eso Gastón Silva interesa que siga.
Cristian Salvador ha llegado dando las gracias al Huesca por su interés en ficharlo. No lo pasó bien la pasada campaña en el Sporting y el club altoaragonés siempre mantuvo cierta querencia por él. Cristian Salvador ha sido el primer fichaje del nuevo proyecto y lo hace por tres temporadas. «Me considero medio centro, jugador con gran recorrido y de buen trato con el balón», afirmó cuando se le ha preguntado por cómo se define.
Ni que decir tiene que llega con el objetivo del ascenso a Primera. Es cierto que no pronunció en ningún momento esa palabra, pero sí reconoció que ese objetivo es una presión extra que no le desagrada. Prefirió decantarse por «vamos a pelear por cosas bonitas». Respecto a Nacho Ambriz, los primeros entrenamientos han servido para ver que su propuesta de fútbol «es la del dominio del balón, el orden y la intensidad tras pérdida», en palabras de Salvador
¿Y respecto a renovaciones, continuidad e incorporaciones? El director deportivo sacó su manual de esgrima. Se le preguntó directamente por Dani Calvo y sacó el escudo. «Nos parece un buen futbolista, están claros sus lazos afectivos con Huesca y no es el momento de hablar de nombres propios», dijo. En relación al portero Álvaro Fernández, que no esconde su deseo por seguir en Primera División, Rubén García entiende todo, respeta los deseos del riojano y especificó que lo que ocurra «será con la idea del Huesca» para rematar su entrecomillado con una realidad que pronunció en un par de ocasiones a lo largo de la rueda de prensa: «El fútbol también es un negocio».
En relación a Juan Carlos y Mosquera reconoció que se está al habla con sus agentes y escurrió que en el caso de que no se llegue a un acuerdo «llegarán otros igual o mejores» que los que se vayan. Respecto al conjunto de movimientos, Rubén García significó que el mercado está sujeto por ciertas estrecheces económicas debido a la Covid-19 y dibujó un panorama donde el trueque puede estar muy por encima del pago de las cláusulas de rescisión.
