Ambos fueron los goleadores de una SD Huesca que dejó una muy buena imagen en la segunda jornada. El colombiano no tardó en estrenarse como goleador, algo que también logró el madrileño, que portó el brazalete.
La SD Huesca ha empezado mejor que la temporada pasada, por lo menos en estas dos primeras semanas. La victoria de los de Rubi en el segundo partido no solo llega dos jornadas antes que hace justo un año, si no que también han llegado más goles que los que se marcaron en las tres primeras jornadas del curso 2016/17. El recien llegado ‘Cucho’ Hernández y un incansable Melero fueron los autores de los goles oscenses y protagonistas principales del encuentro.
‘Cucho’, el portador del dorsal ‘9’ de la SD Huesca, ha tardado 126 minutos en marcar su primer gol oficial de la temporada; es decir, ni partido y medio le ha costado. Un hecho más que reseñable, sobre todo tras los problemas de la temporada pasada para que los delanteros vieran puerta, ya que Borja Lázaro tardó 10 partidos en anotar su primer tanto (contra el Mirandés en la jornada 10) y Urko Vera tuvo que esperar mucho más. También, el colombiano se ha convertido en el futbolista más joven que ha marcado con la elástica azulgrana (18 años, 4 meses y 6 días).
El sábado, en El Alcoraz, ‘Cucho’ se sacó una obra de arte de la chistera. El joven futbolista colombiano, tras una genial triangulación con tacón de Álvaro Vadillo incluido, recibió la pelota en la frontal del área, levantó la cabeza y colocó el cuero en el palo largo de forma milimétrica. Un francotirador había hecho su aparición en el estadio oscense. Además, ese gol supuso la tranquilidad para la grada y la confirmación en el marcador del juego desplegado por el Huesca.
Melero, también goleador
El mediocentro madrileño terminó la temporada siendo uno de los hombres más importantes del equipo de Anquela y parece que su liderazgo va a más. Con Aguilera envuelto en un mar de dudas, Melero se ha aupado como el líder del mediocampo e incluso ayer ejerció de capitán por la ausencia de Carlos David.
Además, para celebrar su capitanía, Melero marcó un gol al más puro estilo Melero. Llegando desde segunda línea, peleó un pase de la muerte que salió demasiado largo hasta que la recuperó yéndose al suelo. Después, tras recuperar el balón dentro del área rival, miró el arco y mandó el balón a las redes. El Huesca terminó con 2 goles y mostró un nivel de juego que se vuelve muy esperanzador para lo que viene.
