El principal gol que recibe el Huesca viene desde el centro lateral. A pesar de no haber encajado ninguno de cabeza (equipo de la Liga menos goleado junto al Betis en este aspecto), los azulgranas tiene un gran déficit cuando un jugador rival llega a línea de fondo y pone un pase raso hacia atrás. Escalante en Eibar, Yuri en Bilbao, Suárez y Pulido -en propia- en Barcelona, Griezmann en el Wanda Metropolitano, Borja Iglesias en El Alcoraz y Sarabia en el Pizjuán han logrado rematar a la red centros rasos desde los costados. Ya sea por la pérdida de la marca, por un despiste o por la llegada por sorpresa de un rival, la defensa del Huesca se está viendo superada este contexto.
🔵🔴 No te pierdas el programa de Balones Fuera analizando el Huesca (1-0) Málaga
Existe otro claro indicador que viene repitiéndose: de los 19 goles encajados con la pelota en movimiento (más 1 de falta y 2 penaltis), hasta 15 han sido desde dentro del área y, algunos, desde dentro del área pequeña. Desde fuera del área (4) han llegado los de Imbula, Mikel Merino, Thomas y Koke. Los tantos restantes de Sarabia y Borja Iglesias, el de Jordi Alba, Dembélé y Rakitic, los dos de Messi y el de Susaeta (aunque empieza con un centro lateral previo a la pared con Williams) han sido los goles recibidos en la zona de máximo riesgo, todos ellos en situaciones de mano a mano.
Y pese a que también es un porcentaje alto, varios de estos mano a mano han llegado a la contra cuando el Huesca estaba lanzado a por el tanto, como en los casos de Messi, Dembélé y Borja Iglesias. Francisco tiene ante sí el reto llevar al Huesca a dejar la portería a cero por primera vez y de conseguir taponar la sangría en estas aproximaciones laterales de los rivales.
