Un Entrerríos efectivo en la primera parte
El encuentro comenzó con el Entrerríos Zaragoza más asentado, dominando la posesión aunque sin demasiada profundidad. Cuando parecía que el Wanapix estaba más cerca del gol, llegó el 1-0 de Emma, tras una falta que generó protestas del banquillo visitante. Poco después, María amplió la renta con un disparo desviado por Mazas que sorprendió a la portera blanquilla.
El 2-0 al descanso premiaba la pegada del Entrerríos, aunque el resultado fue excesivo para lo visto sobre la pista, ya que el Wanapix también dispuso de varias ocasiones claras en botas de Titi y Rebe, siempre topándose con la inspirada guardameta Leyre.
Wanapix reacciona con garra
El segundo tiempo tuvo otro guion. El Wanapix Aldelís dio un paso adelante y, pese al cansancio derivado de las bajas, buscó recortar diferencias con disparos lejanos y la apuesta final por la portera-jugadora. La recompensa llegó con un tanto de Rebe, que devolvió la esperanza a las suyas.
La emoción alcanzó su punto álgido a falta de 30 segundos, cuando Ana Mazas conectó un disparo espectacular a la escuadra para sellar el 2-2 y llevar el choque a la prórroga, desatando la euforia en la grada.
Prórroga y penaltis: equilibrio total
El tiempo extra reflejó la igualdad entre ambos conjuntos. El Wanapix acarició el tercero con una ocasión clarísima de Rebe, mientras que el Entrerríos rozó el gol en la segunda mitad de la prórroga, encontrándose con una parada salvadora de María Soláns.
Con el marcador inamovible, la tanda de penaltis dictó sentencia. Y en ese momento decisivo, el Entrerríos Zaragoza se mostró más acertado, asegurando su billete para la siguiente ronda de la Copa de la Reina y celebrando un triunfo de gran valor ante un rival que lo dio todo.
Orgullo para el futsal aragonés
El desenlace fue cruel para el Wanapix Aldelís, que se marcha con la sensación de haber merecido más tras una remontada heroica, pero al mismo tiempo supone un éxito para el Entrerríos Zaragoza, que sigue vivo en el torneo y demuestra que tiene un proyecto competitivo.
Más allá del resultado, el choque dejó una imagen poderosa: dos equipos aragoneses peleando de tú a tú en una gran cita nacional, dejando claro que el fútbol sala femenino de la comunidad goza de buena salud.