HUESCA | Durante esta semana se celebra en el aeródromo de Santa Cilia el LIV Campeonato Nacional de Vuelo sin Motor que determinará los campeones de España en dos clases en función de la categoría de los planeadores. En total son 32 participantes, la mayoría de ellos españoles aunque por tratarse de un Open, fuera de la clasificación nacional también compiten pilotos extranjeros. En esta ocasión hay que destacar la presencia de tres pilotos polacos, un alemán y un argentino. La competición mueve alrededor de 100 personas entre pilotos, acompañantes y personal técnico.
Las condiciones meteorológicas para la semana se presentan excepcionales y en principio parece que ofrecerán posibilidades de marcar pruebas a lo largo de toda la longitud del Pirineo. A modo de ejemplo, la prueba del domingo para la clase Open empezó en Villanúa y marcó como primer punto de viraje Andorra la Vella, seguido de Hecho, el Castillo Mayor (sur del cañón de Añisclo) y Jaca. En total son 504 kilometros.
La clase Club tiene la puerta de inicio en Borau, sigue hasta Pont de Suert, Hecho, Pico del Vignemale, Yebra de Basa y Jaca. Los planeadores se lanzan gracias a la ayuda de cuatro aviones remolcadores hasta una altura de unos 600 metros en las proximidades del aeródromo.
Aeroclub Nimbus
El Aeroclub Nimbus de Vuelo a Vela ha sido de nuevo el encargado por la Real Federación Española para la organización de esta competición que ayuda a que el aeródromo gane cada vez más actividad hasta el punto de situarlo como el aeródromo con más actividad deportiva dentro del mundo del vuelo sin motor de España. El Aeroclub es una de las sociedades deportivas más antiguas de la provincia de Huesca, próximo a cumplir sus primeros cincuenta años de vida. Inició sus actividades en el antiguo aeródromo de Monflorite, y trasladó sus actividades al aeródromo de Santa Cilia tras su reconversión en el actual aeropuerto Huesca-Pirineos.
Aeródromo de Santa Cilia
El aeródromo de Santa Cilia es un aeródromo de titularidad pública que gestiona Fly-Pyr Santa Cilia. Se inauguró en el año 1998 con el objetivo de ofrecer un punto de inicio y retorno a los practicantes de esta disciplina tanto nacionales como extranjeros, de hecho responde al impulso de los pilotos franceses de los casi 18 aeródromos dedicados a esta especialidad en la vertiente norte del Pirineo. Hoy se ha convertido en una instalación de referencia para cualquier especialidad deportiva aeronáutica y recibe con regularidad pilotos de ultraligero, aviación ligera e incluso aviación ejecutiva de todos los puntos de Europa.