ZARAGOZA | Sergio Bermejo está mostrando su magia este último tramo de temporada. El juego del madrileño ha convencido a Escribá, convirtiéndolo fijo en el once zaragocista. Y no es para menos, porque juega y convence. La afición blanquilla está viendo un Bermejo regular, demostrando el nivel que prometía, y no esos breves destellos puntuales que hasta ahora había ofrecido.
A pesar de la derrota, Bermejo volvió a ser, un partido más, el mejor jugador del Real Zaragoza junto a Fran Gámez, formando así el dúo letal de la banda derecha blanquilla. Entre los dos suman seis aportaciones de gol en tan solo seis partidos.
La principal razón de su gran estado de forma es la confianza. Esta es clave para todos los futbolistas. Bermejo se atreve a disparar hasta desde fuera del área, como se ha podido ver durante los últimos meses, sobre todo, en su último gol ante el Oviedo. Un gol de esas magnitudes es difícil de ver en segunda división: se va con facilidad de dos centrocampistas, y a más de 20 metros consigue ajustarla rasa junto al palo, imposible para el portero. El extremo suma ya, a falta de tres jornadas, 4 goles y 4 asistencias, sus mejores números desde que llegó al Real Zaragoza.
Todavía no ha terminado la temporada y, con la salvación en la mano, y una promoción ya imposible, el «10» del Real Zaragoza tiene tiempo de seguir creciendo como futbolista, así como de probar aspectos nuevos dentro del terreno de juego.
Este rendimiento no solo ha convencido a Escribá, sino también a la directiva y a la afición, quienes no tienen ninguna duda y lo quieren en la plantilla la próxima temporada. Junto a Cristian, Francho, Azón o Jaume Grau, Bermejo es considerado un jugador clave. El club no tiene intención de traspasar a ninguno de los mencionados, pero escucharían ofertas interesantes.