Abultada derrota de Casademont Zaragoza por 60-91 ante Lenovo Tenerife. Un marcador que lo dice todo. Salvo el primer cuarto, el equipo de Luis Casimiro ha sido un juguete rojo en manos de los insulares. Eso si, Robin Benzing se ha convertido en el máximo anotador de la historia del club en Liga Endesa, y Tryggvi Hlinason el máximo taponador. Elias Harris ha sido el máximo anotador del partido con 13 puntos.
Casademont Zaragoza saltaba a pista con San Miguel, Ennis, Brussino, Harris y Wiley. Dos de los jugadores que terminan contrato en junio, Dylan Ennis y Elias Harris, llevaban el timón de los rojillos; mientras que Marcelo Huertas marcaba el timón en los insulares (15-10). Las rápidas transiciones de Sulaimon y su conexión con Benzing o Hlinason ponía el 24-17 para finalizar el cuarto, pese a los ganchos de Shermadini.
El récord de Robin Benzing
Un 2+1 de Harris otorgaba una renta de diez puntos (27-17), pero la reacción de los hombres de Txus Vidorreta era un parcial de 0-10 con unos acertados Cavanaugh y Rodríguez (27-27). Dylan Ennis se desconectaba del partido, acumulaba varias pérdidas y Lenovo Tenerife sacaba rédito con otro triple de Salin y el buen hacer de Santi Yusta (32-38). Los libres de Doornekamp dejaban el 37-41 al descanso. Este cuarto servía para que Robin Benzing se convirtiera en el máximo anotador del club en Liga Endesa, superando a Stevan Jelovac:
🥇RÉCORD @rosinio12 Benzing se convierte en el máximo anotador histórico del @CasademontZGZ, superando a Stevan Jelovac #LigaEndesa
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— Liga Endesa (@ACBCOM) May 19, 2021
Tenerife salía del descanso con más ganas de llevarse la victoria. Casademont se precipitaba y especialmente Brussino tomaba decisiones erráticas fruto de estar desconectado. Entre Huertas, Shermadini y los triples de Sasu Salin obligaban a Luis Casimiro a pedir tiempo muerto (44-54). Ennis no estaba cómodo y se llevaba una técnica. El equipo cerraba el cuarto con trece puntos de desventaja tras una nueva canasta de Salin (48-61). Un nuevo registro se batía en este periodo, ya que Hlinason se convertía en el máximo taponador del club al superar a Henk Norel.
Si quedaba alguna opción de reengancharse al partido, quedaba dilapidada por completo al inicio del último cuarto. En un visto y no visto, la diferencia alcanzaba los dieciocho puntos, al no poder parar a Huertas y Shermadini y quedarse sin ideas en ataque (50-68). Javier Justiz aprovechaba sus minutos para mostrar que sigue esforzándose para recuperar su mejor versión. El marcador, en todo caso, terminó siendo bochornoso (60-91).
