Rubi ha conseguido sacar la mejor versión de Sastre cuando ya casi nadie creía en él. Ante el Cádiz, el jugador balear volvió a ser uno de los destacados además de anotar el gol de la victoria, algo que no hacía con el Huesca desde 2010.
La llegada de Sastre el año pasado a la SD Huesca se produjo tras uno de los culebrones más extensos y complejos que ha vivido el club oscense en los últimos años. Después de todo un verano donde se intentó una y otra vez pero en el que el Leganés solo daba largas, el balear llegaba a Huesca en el mercado invernal con la vitola de ser un futbolista importante. Sin embargo, con el bloque ya formado y definido, Sastre únicamente disputó minutos esporádicos y a un nivel muy justo, completando únicamente 5 titularidades y 421 minutos.