HUESCA | El Esneca Fraga no pudo culminar su excelente temporada con una final copera, pero su papel en la Copa de la Reina refuerza aún más el estatus del club como una de las grandes referencias del hockey patines femenino. Las aragonesas cayeron en semifinales por 1-3 ante el Cerdanyola, anfitrión del torneo, en un encuentro intenso y con alternativas que se resolvió por detalles.
El Cerdanyola CH volvió a ser la gran sorpresa del torneo. Ya en cuartos había dejado fuera al Telecable Gijón, vigente campeón de Liga, y en semifinales repitió hazaña frente al Fraga, subcampeón liguero y uno de los favoritos al título. El equipo catalán, empujado por su afición, aprovechó al máximo sus ocasiones en un duelo de alta tensión.
El encuentro comenzó con ritmo contenido y ambos conjuntos tanteándose. Pero fue el Cerdanyola quien golpeó primero en el minuto 8, cuando Carla Castro inauguró el marcador para las locales. A pesar del mazazo, el Fraga no se descompuso y tuvo una gran ocasión para empatar desde el punto de penalti, pero no logró transformar la pena máxima antes del descanso.
En la reanudación, el guion se mantuvo igualado, pero Noa González amplió la ventaja para el Cerdanyola, poniendo el 2-0 y obligando a las aragonesas a remar contracorriente. De nuevo, las catalanas erraron un penalti que podría haberles dado aún más margen y prácticamente sentenciar el choque.
El orgullo fragatino no fue suficiente
El Esneca Fraga sacó su carácter competitivo y se metió en el partido con un tanto de Adriana Soto, a falta de 11 minutos y 40 segundos. La goleadora aragonesa, que ha anotado todos los goles de su equipo en esta edición copera, encendía la esperanza de remontada. Sin embargo, tres minutos después, Gemma Solé sentenció el encuentro con el 1-3 definitivo, dejando sin respuesta al Fraga. Ese tanto fue un golpe duro para las de Víctor Paraíso, que lo intentaron hasta el final, pero no pudieron forzar una prórroga que habría hecho justicia a su esfuerzo.
Con esta derrota, el Esneca Fraga pone fin a una campaña extraordinaria, en la que ha sido subcampeón de Liga, finalista de la Copa del Mundo de clubes y semifinalista de la Champions Femenina. Una hoja de servicios brillante que evidencia el trabajo bien hecho desde la base hasta el primer equipo.
El encuentro también sirvió como despedida para Adriana Soto, gran referente del club, que cerró su etapa en el Fraga con entrega, goles y liderazgo. Su nombre quedará marcado en la historia reciente del club.
Así, aunque no haya podido levantar el título, el Esneca Fraga ha demostrado que está entre los grandes del hockey nacional e internacional. El futuro se presenta esperanzador para una entidad que no deja de crecer y que, seguro, volverá a pelear por títulos en el corto plazo.