El partido fue, además, el primer encuentro de Miki Fornés a las órdenes de Miguel Rivera. El central mallorquín de 25 años ha sido la única incorporación del equipo turolense este verano, que ha preferido renovar al grueso de la plantilla tras los éxitos de la temporada pasada. Fornés, en un vídeo publicado por el club en Twitter tras el partido, declaró que «tenía muchas ganas» de jugar su primer partido y se mostraba confiado en la plantilla, porque hacen «un gran grupo». También sirvió para que Máximo Torcello, hasta ahora receptor, se estrenara como nuevo líbero del equipo. Según se anunció en la presentación de la competición europea, él será el sustituto del fallecido Vinicius Noronha, ya que la plantilla está cerrada y no habrá una nueva incorporación.
Durante el día de ayer, el Club Voleibol Teruel también realizó otras actividades además del partido en la localidad de Utrillas. En su llegada, pudieron acudir al Ayuntamiento, donde la institución local les recibió con honores, mientras que por la tarde los jugadores tuvieron la oportunidad de hacer un clínic con los más pequeños del pueblo.
De esta manera, los de Miguel Rivera realizaron el primer test de la temporada, tras haber comenzado la preparación y los entrenamientos el pasado tres de septiembre. Lo han hecho algo más tarde de lo previsto, pues el partido programado para este pasado lunes contra el CV L’Illa-Grau en Alcañiz se suspendió por el fallecimiento de Vinicius Noronha. Ahora, jugarán este próximo lunes contra el Río Duero Soria como visitantes, el miércoles contra el Textil Santanderín en Sarrión y finalmente el sábado el equipo se presentará ante su afición con el último encuentro ante el Río Duero Soria en el Pabellón Los Planos.