ZARAGOZA| Una vez certificada la permanencia en la categoría, el Real Zaragoza ya medita colocar las primeras piedras de su nuevo proyecto. Con la ventana de fichajes todavía cerrada, las miradas se centran en aquellos futbolistas cuyo futuro más inmediato todavía está en el aire. Lluís López, Jair Amador y Carlos Nieto, que finalizan su contrato el próximo 1 de junio, trazan una situación marcada por el todavía desconocido desenlace. Sin nada confirmado hasta el momento, el adiós de cualquiera de ellos podría suponer un fin de ciclo, un cierre a una etapa prolongada en el tiempo.
La situación de Carlos Nieto es quizá la más clara. Con una grave lesión y tan solo 166 minutos a sus espaldas en todas las competiciones, su destino podría estar lejos del Real Zaragoza, en un lugar donde pueda volver a sentirse futbolista. Por el contrario, Jair Amador evidencia un contexto más complicado, descrito a través del arraigo hacia un club que meditó seriamente su salida en ambos mercados de la temporada pasada. El luso-caboverdiano podría extender su vínculo con la disciplina zaragocista, pero con ciertas modificaciones en sus condiciones salariales y su rol sobre el césped.
Lluís López vive una situación algo convulsa. El capitán ha experimentado la cara amarga del fútbol durante varios meses, plasmando la falta de rodaje en un rendimiento pobre, escaso de recursos y poco contundente en muchos conceptos. Es por eso por lo que la continuidad de ’24’ está en estos momentos en el aire, así como la de otros futbolistas de la plantilla.
Doble expediente en la delantera
A pesar de que su contrato finaliza en 2026, Sinan Bakis y Sergi Enrich dibujan situaciones similares, con una salida del club como opción más lógica. Ambos delanteros, prácticamente sentenciados en la ciudad, atesoran una papeleta difícil: su sitio está ocupado por otros futbolistas en la rotación ofensiva. Sin sitio en el actual Real Zaragoza, su abandono de la entidad se antoja complicado.