ZARAGOZA | El Casademont Zaragoza afronta una de sus noches más importantes de la temporada. Tras la dolorosa derrota ante el Valencia Basket en ACB (71-115), el equipo de Porfirio Fisac busca dar un golpe de autoridad en su otra competición, en la FIBA Europe Cup y en sus cuartos de final ante Cholet (miércoles 20:00 horas). «Mañana tenemos que hablar todos en la pista», expresó el técnico en la previa del duelo.
El equipo aragonés llega a este compromiso tras encajar un duro correctivo en la Liga Endesa, donde cayó por 44 puntos en su propia casa, el Príncipe Felipe. Fisac es consciente de la necesidad de levantar el ánimo y recuperar el nivel de juego, por lo que considera que «ahora más que nunca necesitamos compromiso», señalando que el factor mental será clave ante un rival físicamente poderoso como el Cholet. El técnico no esconde la dificultad de la eliminatoria. «No vamos a jugar el último cuarto de esta eliminatoria en casa, y eso es un factor que condiciona», explicó, dejando entrever que es fundamental sacar un buen resultado en el Príncipe Felipe para no viajar a Francia con desventaja.
Además del reto deportivo, el equipo llega con varias incógnitas en el apartado físico. Santi Yusta y Jaime Fernández arrastran molestias por sobrecarga, mientras que Nate Watson está afectado por un proceso vírico y es la gran duda. «Es el que más nos preocupa, por la fiebre y el estado en el que está», reconoció el entrenador. Otro de los desafíos del equipo es lograr darle descanso de Bell-Haynes, quien ha llegado realmente fatigado tras las ventanas europeas con Canadá, sumado al duelo ante Valencia. «Hemos tenido que mover fichas y ahora es como empezar otra vez», confesó Fisac, que busca recuperar la química que el equipo mostró antes del parón de selecciones para afrontar este tramo medio-final de la temporaa.
Cholet y varios nombres propios que preocupan a Fisac
Fisac analizó al Cholet como un equipo que aúna juventud y veteranía. «Es un equipo con muy buen atletismo en sus jugadores, con gente experimentada y jóvenes con calidad», detalló. Entre sus nombres más peligrosos, destacó a Campbell y Vautier, a quien calificó como «uno de los jugadores franceses top en la liga».
Además, señaló el peligro de Smith y Ebou-Ndow, jugadores con gran capacidad anotadora y versatilidad en el juego exterior. «Son un equipo que juega con mucha intensidad y que tiene claro su plan de juego. Para nosotros es un gran reto», reconoció el entrenador.
Una oportunidad histórica para el Casademont
A pesar de la incertidumbre, Fisac mantiene el optimismo y quiere que el equipo y la afición se enfoquen en lo positivo. «Estamos jugando unos cuartos de final y podemos alcanzar unas semifinales en Europa, algo que este club nunca ha logrado en la FIBA Europe Cup», recordó.
Por ello, lanzó un mensaje a la afición: «Quiero que la gente venga a apoyar, a animar y a ser feliz de jugar algo importante». Sabe que el equipo debe responder en la pista, pero también quiere sentir el respaldo del Príncipe Felipe en una noche clave para el Casademont Zaragoza.