Porfirio Fisac, entrenador del Tecnyconta Zaragoza, ha explicado que el choque de este domingo ante el Baxi Manresa será «un partido difícil». El cuadro catalán lleva «las mismas victorias» (17) que el aragonés y comparten «el mismo objetivo», clasificarse para las eliminatorias por el título.
«La igualdad es máxima, es un partido totalmente abierto. Vamos a pelear contra un equipo que ha ganado los mismos encuentros que nosotros y luchan por el mismo objetivo. No me creo que por jugar en casa seamos superiores. Creo que somos dos plantillas bastante iguales», ha apuntado el técnico.
En este sentido, Fisac ha llamado a la prudencia recordando la holgada derrota que sus pupilos cosecharon en la primera vuelta de la competición liguera en terreno catalán (94-73).
Manresa sólido y estable
Además ha destacado que durante el segundo tramo de la temporada el rival de los aragoneses ha realizado varios cambios de jugadores en su plantilla. Algo que no les ha impedido mantener «la condición de equipo sólido y estable». Lo están demostrando cada fin de semana consiguiendo «un año impresionante».
El preparador segoviano ha incidido en la capacidad de «tiro superior» que presenta desde el puesto de base Corey Fisher, el cual llegó para reemplazar a Alex Renfroe. Está acompañado por el exjugador ‘rojillo’ Sergi García, actualmente cedido por el Valencia Basket.
El peligro de Ryan Toolson
También ha aplaudido la habilidad anotadora de Ryan Toolson, junto a Álvaro Muñoz y Pére Tomàs (también vistió la elástica del equipo zaragozano), y la «velocidad en el exterior» que aporta Gabriel Lundberg, uno de los jugadores «top» de la Liga en esa faceta.
En cuanto al juego interior, Fisac ha manifestado la importancia que tienen jugadores como Tomislav Zubcic para anotar de dos. Sobre todo ha destacado el poderío «físico» de sus ‘cincos’: Cady Lalanne junto a Jordan Sakho y Yankuba Sima partiendo desde el banquillo.
A pesar del poderío que atesora el cuadro catalán, Manresa afronta este trascendental partido con varias bajas que pueden condicionar el transcurso del encuentro.
No obstante, el entrenador de los zaragozanos ha explicado que, en este aspecto, su planificación del choque no sufre alteraciones. Independientemente de quién se enfunde el uniforme rival en la pista del pabellón Príncipe Felipe.
Sabor de final
Este encuentro tiene sabor a final y los pupilos de Fisac están concienciados de que han de afrontarla como tal. De hecho, el segoviano ha subrayado «el importante grado de ambición» con el que sus chicos están trabajando a lo largo de la semana.
«Los veo con ambición, con hambre, pero esto ha de estar controlado por la experiencia del equipo. Muchos de los jugadores jóvenes no la tienen en este tipo de partidos, aunque tienen muy claro lo que quieren ser. Ese grado de ambición es muy importante y ahora hay que ver cómo somos capaces de resolverlo», ha manifestado el técnico.
Que no sea el último partido
El duelo ante el Manresa puede ser el último partido que los zaragozanos juegan ante su afición si finalmente no se clasifican para disputar el ‘playoff’. Sin embargo, jugadores y cuerpo técnico quieren estirar un poco más ese adiós a una magnífica temporada.
«Los tiempos que vivimos son para disfrutar, por eso les pido a la afición que vengan a empujar y a disfrutar. En la pista habrá gladiadores que se dejarán la vida por conseguirlo. No soy adivino, no sé qué pasará, pero este público se merece que cumplamos el sueño», ha concluido el preparador.