¿Habrá revolución en el club?

Dejarán de ser consejeros: Agustín Pueyo, Sergio Gracia, Josete Abarca, Pedro Ibaibarriaga y Carmelo Bosque. El conflicto de intereses afecta a varios de estos consejeros que trabajan para el club en diferentes disciplinas y que eran consejeros del club. El que decidirá quien de ellos sigue trabajando para la entidad es Gustavo García Capó, que será uno de los cinco consejeros del Huesca y que fue el responsable de la auditoría externa que solicitó el club y que tiene una experiencia contrastada en planes de saneamiento y restructuración de grupos empresariales.

Petón, atento a todos los movimientos

Los otros dos nombres que van a entrar en el consejo de administración los traerá José Antonio Martín Otín `Petón´. El ex consejero sigue siendo el presidente de la Fundación Alcoraz, que es el máximo accionista del club, y sigue siendo fundamental en la toma de decisiones. «Estamos no sólo en tiempo de frenar esta situación, sino que tenemos la posibilidad de volver casi inmediatamente a las cifras positivas, aunque eso va a exigir una dolorosa reestructuración, de arriba a abajo», explicaba Petón el pasado 26 de junio.

Primeros recortes en el Huesca

El Huesca ha eliminado a uno de los dos filiales que tenía el equipo femenino, ha despedido a Manolo Torres, se ha prescindido del fotógrafo, del servicio de cocina, de un readaptador del primer equipo y se ha reducido el personal que trabajaba en la tienda. Hay duplicidad en algunos puestos y se esperan más movimientos en la entidad azulgrana. En la plantilla no deportiva hubo 39 trabajadores y entre ellos se reparten 2.285.000 euros. Doce en scouting, materiales e instalaciones. Siete entre tienda y cocineros. Y 20 entre oficinas y resto de departamentos. En total, la entidad tiene 116 trabajadores, de los que 28 pertenecían a la plantilla deportiva inscribible durante la temporada 22/23.