Dos puntos de nueve posibles, o lo que es lo mismo, dos empates y una derrota en tres partidos, algo que no sucedía desde el mes de agosto, cuando, en las tres primeras jornadas, los azulgrana empataron contra Alcorcón y Gimnàstic y perdieron en Zaragoza. La historia se ha repetido ahora con los empates en Vallecas y Tenerife y la derrota en casa ante el Girona, algo que, además, rompe la tónica actual del Huesca en esta temporada, acostumbrado a sacar mejores resultados en El Alcoraz que lejos de él.
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Bien es cierto que la sensación de mayor «crisis» llegó en el mes de noviembre, cuando el equipo encadenó dos derrotas consecutivas (única vez que ha sucedido en esta temporada hasta el momento), fuera contra el Sevilla Atlético y, sobre todo, en casa y de manera muy contundente ante el Elche (0-3), en ambos encuentros viéndose un Huesca muy perdido. Pero hay que insistir en el hecho de que ni mucho menos se puede poner el estado de alerta en un equipo que hace dos jornadas estaba en ‘playoff’ y que viene de conseguir dos empates lejos del Alto Aragón, en especial uno, el de Vallecas, muy meritorio, por rival y por cómo se puso el partido.
Los oscenses tratarán de revertir la situación venciendo en El Alcoraz a un UCAM Murcia que llega en una profunda crisis de resultados.
