Casademont Zaragoza ya tiene nuevo pívot. Joel Soriano, dominicano de 2,08 metros y 25 años, refuerza el juego interior del equipo aragonés en la temporada 2025-26, cedido por el Valencia Basket. Una incorporación estratégica que aporta físico, juventud y hambre competitiva a un proyecto que busca consolidarse en la élite de la Liga Endesa.
“Estoy contento, voy a hacer lo mejor posible para el club y para ganar muchos juegos”, aseguró en su primera entrevista como jugador rojillo. “Lo que necesiten que yo haga, lo hago. Y si es dar un show, voy a darlo”.
Buen debut en ACB con Valencia: eficacia y experiencia en playoffs
Soriano ya ha dejado una primera muestra de su potencial en la Liga Endesa. En los ocho partidos que disputó con Valencia Basket en el tramo final del pasado curso, promedió 5,4 puntos y 3,6 rebotes en apenas 9,3 minutos por partido. Su impacto fue inmediato, mostrando capacidad de decisión y energía en cada aparición.
El dominicano también tuvo protagonismo en los playoffs por el título, donde Valencia alcanzó la final. En esa fase, aportó 4,8 puntos y 3,2 rebotes por encuentro, consolidándose como parte activa en la rotación interior del equipo taronja.
Un pívot en crecimiento: Puerto Rico y NCAA como avales
Antes de llegar a España, Joel Soriano brilló en la liga puertorriqueña (BSN) con los Santeros de Aguada. Fue el tercer mejor reboteador y el cuarto máximo taponador del campeonato, lo que evidencia su influencia en la pintura y su capacidad defensiva.
En la NCAA también dejó huella, primero en Fordham y luego en St. John’s, donde construyó un perfil de jugador fiable, fuerte en los tableros y con buena lectura del juego bajo el aro.
“Yo quiero crecer como jugador, ser la mejor versión de mí. Mejorar, aprender y ayudar al equipo en lo que haga falta. Ese es mi objetivo personal este año”, explicó.
Se incorporará tras disputar la FIBA AmeriCup con República Dominicana
Antes de vestir la camiseta de Casademont Zaragoza, Soriano participará en la FIBA AmeriCup 2025, que se celebra en Nicaragua del 23 al 31 de agosto. Para él, no será un torneo cualquiera: “Estamos preparándonos para llegar listos y meter manos. Esto es importante para cualificar al Olímpico. Si Dios quiere, estaremos ahí en 2028”.
Consciente de su rol como referente, destaca que “el baloncesto dominicano está creciendo y yo quiero poner la bandera arriba. Juego por mi parque, por mi gente. Hay mucho por hacer todavía”.
Identificado con el club y con la afición
El nuevo jugador rojillo llega con la lección bien aprendida. “Vi muchos partidos de Zaragoza antes de firmar. Sé cómo juega el equipo, conozco al entrenador de Canadá. Tengo muchas ganas de llegar, de tocar la pista y de sentir a los fanáticos”.
Desde el club, se valora su incorporación como una apuesta por el presente y el futuro: “Un jugador físico, trabajador y con potencial para crecer”. Confían en que su cesión no solo eleve el nivel competitivo de la plantilla, sino que represente “el inicio de una etapa de esfuerzo y ambición compartida”.
Joel Soriano se suma así a un proyecto que ilusiona, con la firme intención de dejar huella desde el primer partido: “Quiero ver a la gente con la bandera, animando. Vamos a disfrutar mucho este año”.