ZARAGOZA | El Casademont Zaragoza ya tiene capitán para pilotar su nuevo proyecto en la Liga sub-22. Jorge Serna, técnico zaragozano con amplia trayectoria en categorías de formación, ha sido el elegido para dirigir al equipo en una competición que pretende convertirse en la gran plataforma de desarrollo del baloncesto español. Un proyecto ambicioso que aúna formación, alta exigencia y compromiso con el primer equipo.
“Volver a Zaragoza siempre es una ilusión. Esta es una gran responsabilidad, pero también una oportunidad preciosa”, asegura Serna, que ya colaboró con el cuerpo técnico del primer equipo en el tramo final de la pasada temporada, a las órdenes de Rodrigo San Miguel.
El entrenador aragonés ya dejó una huella importante en el club liderando al filial Anagán El Olivar en Liga EBA, donde realizó una destacada labor. Su experiencia previa en el desarrollo de jóvenes talentos lo convierte en un perfil ideal para este nuevo reto dentro del ecosistema Casademont.
Un reto formativo con ADN competitivo
La creación de la Liga U sub-22, impulsada por la FEB y la ACB, responde a una necesidad urgente del baloncesto español: retener talento joven que en los últimos años ha emigrado masivamente a Estados Unidos en busca de oportunidades. Para Serna, el nuevo torneo “completa un vacío formativo que existía entre los juniors y la élite”, y lo considera un avance “histórico”, al unir a todos los estamentos del baloncesto nacional.
“Era necesario. Muchos jugadores saltaban a ligas profesionales sin estar preparados para competir contra veteranos de 30 años. Esta liga es esa transición que les faltaba”, explica con convicción. No esconde que el proyecto es una “prueba piloto”, pero lo afronta con el convencimiento de que todos los clubes implicados “van a poner todo de su parte para que funcione”.
Al servicio del primer equipo, sin perder de vista la ambición
Serna tiene claro que el Casademont sub-22 debe cumplir tres grandes objetivos: “Ayudar al primer equipo, desarrollar al máximo a los jugadores y competir al mayor nivel posible”. Ese equilibrio entre formación y resultados será el gran reto del cuerpo técnico. “Entrenan para competir, para ganar, para estar preparados para la élite”, afirma.
El técnico no oculta que el nivel competitivo de la liga será muy alto. “Parece un campeonato de España continuo. Cada semana vamos a tener partidos de altísimo nivel”, anticipa. “Da igual el grupo en el que nos coloquen. Todas las canteras ACB tienen talento y grandes entrenadores”, añade.
La planificación está enfocada en construir un equipo con dinámica profesional, capaz de integrarse en la estructura del club y de nutrir al primer equipo cuando sea necesario. “El objetivo es que cuando Porfirio Fisac necesite un jugador, lo tenga preparado para rendir desde el primer minuto”, apunta Serna.
Zaragoza, cantera de futuro y ciudad de baloncesto
El Casademont sub-22 jugará sus partidos como local en el pabellón Siglo XXI, en un formato pensado para atraer a la afición más joven y familiar. Serna cree que este equipo puede “ser un producto atractivo para los que disfrutan viendo crecer a jóvenes promesas”, y hace un llamamiento a la afición: “Queremos transmitir nuestra energía y defender Zaragoza de la mejor forma posible”.
Con nombres propios como Youssouf Traoré, Felipe Minzer o Quint van Ooijen, y una base sólida con los mejores talentos de Aragón, el Casademont Zaragoza sub-22 se perfila como uno de los equipos a seguir en esta primera edición de la Liga U. Un grupo que mezcla juventud, talento y ambición, con un líder al frente que conoce profundamente el baloncesto de formación y el entorno zaragozano.
“Zaragoza respira baloncesto y eso lo vamos a notar. Queremos que este equipo sea espejo para los que vienen detrás y herramienta para los que ya están arriba”, concluye Serna. La cuenta atrás para este nuevo proyecto ya ha comenzado, y el banquillo del Casademont ya tiene voz y rumbo.