Keidi Bare y un deseo de año nuevo

ZARAGOZA| El Real Zaragoza afronta el 2025 lleno de noticias, cambios y nuevos comienzos. Miguel Ángel Ramírez llega al club en un mercado invernal de lo más peliagudo. Mientras que Iván Azón tendría su futuro en Italia, Álex Forés se postula como su relevo y Jair Amador parece que resulta necesario en los esquemas del nuevo técnico. En medio de todo el ruido emergen las figuras de los futbolistas que deben consagrarse en esta segunda mitad de campaña y ahí es donde todos los focos apuntan a Keidi Bare. Con un comienzo de mayor a menor rendimiento, el mediocentro albanés necesita recuperar su mejor versión para catapultar al Real Zaragoza hacia la parte alta de la tabla.

La noticia de su regreso a los entrenamientos -estuvo apartado por fatiga muscular- supone un gran alivio de cara al enfrentamiento en el Martínez Valero. Miguel Ángel Ramírez recupera a uno de los abanderados del medio campo zaragocista. Un futbolista destinado a coger las riendas del equipo y a ser diferencial en la categoría. Con tan solo 13 partidos disputados por una sanción y distintas lesiones, su inicio fue tremendamente ilusionante en el Nuevo Mirandilla.

Keidi Bare se dibujó como un mediocentro total. Fue clave en la media saliendo ganador de prácticamente todos los duelos, dirigió el juego a su antojo, fue preciso en el pase y como culmen a su partido le dejó en bandeja el gol a Aketxe. A partir de entonces, una lesión en los isquios en la cuarta jornada liguera hizo que su buen rendimiento se fuera diluyendo. Más de un mes después reapareció pero ya no era el mismo de siempre. Su fútbol, antes medido, exacto y perfecto se convirtió en impreciso y precipitado. Acciones, a priori sencillas, se volvieron errores groseros que en muchas ocasiones le acarrearon sanción.

El domingo en Elche comienza el camino del nuevo entrenador zaragocista pero también el proceso de recuperación de una de las piezas más valiosas en este Real Zaragoza. Un capitán nombrado por el resto de sus compañeros escaso tiempo más tarde de haber aterrizado demuestra todo lo que representa Keidi Bare para el equipo. Su lugar en la plantilla y su experiencia lo sitúan como uno de los elegidos para dar un paso al frente y recuperar de forma definitiva las sensaciones que dejó no mucho tiempo atrás.