Manuel Ollé, presidente de la Fundación Alcoraz. Fotografía de Juan Manzanara (Diario Público)
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HUESCA | Manuel Ollé recogió la presidencia de la Fundación Alcoraz hace tres meses y desde entonces ha trabajado sin descanso por el futuro del Huesca. La principal preocupación del barbastrense pasa por la viabilidad de un club que volverá a ofrecer un déficit importante (más de cuatro millones de euros) al final de esta temporada. Este jueves Ollé y los otros cuatro patronos van a tomar cartas en el asunto en el club, del que la Fundación es la máxima accionista. Desde las 9:30 de la mañana están citados el presidente, Cuco Lanau, que es el vicepresidente, y los otros tres miembros del patronato: Juan Blas Pérez, Luis Miguel Ciprés y Carlos Santolaria.
La Fundación propondrá cambios a un Consejo que deberá ratificarlos y allí aparece la posibilidad de que regresase Agustín Lasaosa. El ex presidente podría volver a un cargo importante 1.773 días después de dejar el club para centrarse en su defensa en la Operación Oikos. Lasaosa está en nómina del club desde el pasado mes de enero por expresa petición de José Antonio Martín `Petón´, que en esos momentos era presidente de la Fundación Alcoraz. Su puesto actual es asesor deportivo. Se esperan movimientos en el Consejo de Administración que en estos momentos ocupan Fernando Callizo, que es el presidente del Consejo, Josete Ortas, que es el consejero delegado, José Luis Bandrés, Cristina Aranda y Gustavo García Capó.
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La venta de las acciones de la Fundación Alcoraz
La Fundación Alcoraz valorará las tres opciones que manejan para vender el 66,24% del accionariado de la Sociedad Anónima Deportiva. No se descarta la alternativa mexicana ni la anglosajona y en las dos se sigue intercambiando documentación. El accionista mayoritario del Huesca espera que puedan presentar la solvencia para que pueda comenzar la negociación. La tercera opción pasa por la ampliación de capital del club de ocho o diez millones de euros, el plan B, que parece el preferido por una buena parte de la afición. Se trataría de un proyecto provincial, en el que la Fundación tiraría de empresas que han estado muy cerca del club en los últimos meses y que están ligados al tejido industrial altoaragonés.
