Sergio Lamúa ya pisa el parquet del Palacio de los Deportes como máximo responsable del banquillo del club oscense. Es el nuevo entrenador del Peñas. En sus manos, la directiva deposita en este zaragozano descendiente de la comarca del Sobrarbe su máxima confianza para hacer un equipo combativo. Toca devanarse los sesos para conformar una plantilla ajustada a un presupuesto escaso. El hecho de (casi) todas las temporadas en la historia de un club que siempre sueña con lo que fue, que espera un día regresar a las mieles de la gran élite.
El presidente del Peñas, Antonio Orús, presentó al preparador. En la tarjeta de Lamúa la de ayudante del primer entrenador en el Casademont Zaragoza durante 7 temporadas y con anterioridad entrenador en Navarra. «Tiene una amplia experiencia en el mundo del baloncesto y una profesionalidad más que contrastada. Viene con muchas ganas a asumir este reto», señaló el presidente.
La firma de Sergio Lamúa como entrenador descansa en el convenio suscrito entre el CB Peñas y el CB Zaragoza. Firma para la temporada 2021/22. Antonio Orús recalcó la importancia del citado convenio, convencido de que la colaboración va a ser muy positiva para ambos clubes.
El técnico señaló que «compromiso, ilusión y ambición» son los pilares que quiere inculcar en el equipo, como conjunto y en lo individual. Preguntado por la plantilla con la que quiere encarar la temporada 2021/22 evitó dar un solo nombre. Descargó esa responsabilidad en el club. Tan solo deslizó que en unos «dos o tres días» se empezarán a anunciar algún fichaje. «Si dijera nombres me podría equivocar. Sabemos que hay nombres que no van a estar con nosotros y otros que sí», señaló. Y soltó ese latiguillo de todo entrenador de equipo cualesquiera que sea el deporte en liza: «Los que estén aquí, quieren estar. Los que vengan aquí quieren defender este equipo y esta ciudad».
Sergio Lamúa no escondió que ese convenio entre ambos clubes implica una estrecha relación entre los cuerpos técnicos de Peñas y Basket Zaragoza. De hecho, hace un par de días, desveló Lamúa, «recibí un mensaje del primer entrenador del Casademont para reunirnos y ver cómo nos podemos ayudar».
El técnico se marca el objetivo de tener «más días de albahaca que de decepción por la derrota», y subrayó la importancia de que el baloncesto del Peñas lo sienta como algo de la provincia e incluso los aficionados de Zaragoza vayan al Palacio de los deportes porque en la LEB Oro «se ve buen baloncesto». Lamúa pidió «un voto de confianza» para el equipo, que «lo devolveremos desde la cancha con intensidad, agresividad. Que luego hay que pelear por salvar la categoría, pues nada; que estamos más arriba, mejor».
El guiño a la afición fue claro y más cuando él solo ha ganado una vez en el Palacio como visitante y con buenas plantillas. La nueva LEB Oro la dibuja muy igualada, de máxima competitividad «y más justa» que en la edición anterior.