Se busca inquilino para el banquillo peñista. Levitec Huesca ha anunciado que no se prolongará el contrato de Guillermo Arenas la siguiente temporada. El aficionado oscense, en un buen número, pedía un lavado de cara en el área técnica. Era casi imposible e insostenible dilatar la relación. Y eso que el entrenador asturiano no ha tenido, para nada, un mal papel en el club verdiblanco durante sus 106 partidos en Huesca. Sus números le avalan, comparado con sus predecesores. El único «pero» ha sido no poder colar al equipo en playoffs en ninguna de sus campañas. La puntilla, la mala racha esta temporada, la peor del «coach» ovetense, que se frenó a tiempo con la victoria en Marín y posterior en casa ante Canoe.
Guillermo Arenas llegaba en enero de 2017 para suplir a un Sergio Jiménez que había metido al equipo en el abismo. Armando de valor y carácter a sus hombres, con un balance de 7 victorias y 7 derrotas, el asturiano logró salvar a los peñistas del descenso, justo un puesto por encima de los puestos que enviaban a sus ocupantes a LEB Plata. Merecida renovación para el siguiente curso. No se evitaba el sufrimiento en la segunda temporada, primera completa en Huesca. De nuevo apurando hasta el final, firmando la salvación en el último choque. Su comunión con el club hizo que continuara en la 2018/2019 en lo que acabó siendo su mejor campaña. Casi logró meter al equipo en playoffs, y firmó la mejor primera vuelta de la historia, además de la temporada con más victorias. Obligada renovación para este curso, donde volvió el sufrimiento.
Guillermo Arenas, no tan lejos de Quim Costa
La sombra de Quim Costa es alargada en Peñas Huesca. Siempre es un nombre que sale a la palestra cuando se habla del banquillo peñista. Sobre todo porque el catalán consiguió meter a los oscenses en 3 ocasiones en playoffs, las 3 únicas de la historia en LEB Oro. Esta salvedad, estadísticamente, es la única diferencia entre Costa y Arenas.
Solamente 4 hombres han ocupado el banquillo verdiblanco en LEB Oro. El siguiente en llegar será el quinto, que esperemos haga honor al dicho de no hay quinto malo. Mientras tanto, Guillermo Arenas, será el segundo mejor entrenador de la historia verdiblanca, y no tan lejos de Quim Costa.
El primer inquilino en la categoría actual fue Ángel Navarro, que continuó tras el ascenso a LEB Oro. Fueron 61 sus partidos con 21 victorias y 40 derrotas que suponen un 34,4% de triunfos. Fue cesado en la jornada 27 de su segunda temporada, tras una racha de 1 victoria y 8 derrotas, la última ante Girona. Llegó entonces Quim Costa, que acabó salvando al equipo, y extendió su relación con Huesca 4 campañas más, metiendo al equipo en 3 de ellas en playoffs, en 1 llegando incluso a la final. Un total de 135 partidos entre liga y playoffs, con 61 victorias y 74 derrotas, y un 45,2% de triunfos.
Tras la mejor campaña de Quim Costa, club y entrenador no llegaron a un acuerdo, llegando Sergio Jiménez como nuevo entrenador para la 2016/2017. Solamente 20 partidos en tierras oscenses, con un pobre bagaje de 4 victorias y 16 derrotas, que suponen un 20% de triunfos. Fue cesado en la jornada 20 tras 8 partidos perdidos consecutivos, el último ante un rival directo, Marín. Llegó entonces Guillermo Arenas, que salvó al equipo, continuando desde entonces 3 cursos más ligado a Levitec Huesca. Al final de la historia ha superado la centena de choques llegando a los 106, con 47 victorias y 59 derrotas, lo que supone un 44,3% de triunfos.
Por todo ello el aficionado oscense tiene que estar agradecido a Guillermo Arenas, porque el objetivo del club, que es la salvación, se ha logrado siempre. Incluso nos dejó una temporada donde soñamos despiertos con Levitec Huesca, la 2018/2019. Merece un aplauso y respeto cuando los caminos se vuelvan a cruzar en la pista defendiendo otros colores, además de la mejor de las suertes en su futuro en los banquillos.
