La SD Huesca ha conseguido sobreponerse al Real Oviedo por 3-1 gracias a los goles de Raba y Mikel Rico por partida doble. Míchel ya advertía de la dificultad del Huesca-Oviedo, y tras el encuentro ha reincidido en ello tras lo que ha visto. «El partido ha sido complicado. El Oviedo ha jugado hasta con tres sistemas distintos y nosotros hemos intentado dar respuesta a lo que plasmaban sobre el campo», declaró.
Míchel se mostró feliz por la capacidad de su equipo para sufrir menos en la segunda mitad que en la recta final del primer tiempo. Así, destacó que «hemos sido muy contundentes sin conceder nada al rival. Llevar 10 goles en contra es muy importante porque defender bien en esta categoría es fundamental». Esta versión es en gran parte culpa de la entrada de Ferreiro. Con esa sustitución el madrileño buscaba «ajustar mejor al equipo para tener mayor posesión y amplitud por fuera porque no queríamos ser un equipo de transición, queríamos dominar el balón», explicó Míchel.
Sin embargo, a pesar de conseguir largos tramos de posesión del esférico, la SD Huesca de Míchel contra el Oviedo y, a diferencia de otras jornadas, ha sido más vertical. «Tenemos diferentes versiones de juego y eso es positivo para el equipo», apostilló el técnico.
Virtualmente, en ascenso directo
Con esta victoria, los oscenses se sitúan en ascenso directo de forma virtual. Míchel le quitaba hierro a esta situación, indicando que «esto solo nos dice que el equipo está contento, lo hace bien y trabaja bien, pero no nos podemos parar porque estamos aún en la jornada 15″. Por último, preguntado por la diferencia de imagen entre los partidos fuera de casa y en El Alcoraz, ha asegurado que «tenemos siempre un ánimo para ir a ganar fuera. La idea es ir a Fuenlabrada a por los tres puntos».
