El ex presidente de la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada, Alberto Ayora, en representación del movimiento ciudadano “¡Oroel, no se toca!”, presentó las primeras alegaciones al proyecto ante la Mancomunidad del Alto Valle del Aragón y el Ayuntamiento de Jaca.
Entre los argumentos planteados se señala que el proyecto:
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Carece de informe de supervisión previo y no ha sido sometido a la valoración del Patronato del Paisaje Protegido.
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No ofrece garantías de autorización ambiental del INAGA.
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Supone una ocupación del 91,5 % de la zona de uso general del paisaje protegido, con construcciones consideradas “ajenas y desconectadas” del entorno.
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Podría incrementar la presión turística sobre un área frágil y de alto riesgo de incendios forestales, sin estudios de capacidad de carga ni plan de movilidad.
Ayora advierte que el proyecto, lejos de “poner en valor el entorno”, lo transformaría en un foco de ocio urbano, en contradicción con el principio de utilidad pública que debe regir en los espacios naturales protegidos.
La manifestación: rechazo ciudadano masivo
El sábado 6 de septiembre, Jaca vivió una manifestación histórica contra Oroel Park, convocada por la plataforma “Oroel no se toca”. La respuesta ciudadana superó todas las expectativas y se convirtió en un clamor popular por la defensa del monte Oroel.
Los organizadores agradecieron la participación masiva y subrayaron que la movilización ha sido una muestra unánime de rechazo al proyecto, defendiendo un modelo de desarrollo sostenible frente a la masificación turística.
La plataforma también condenó los actos vandálicos con pintadas aparecidos en la carretera y dentro del paisaje protegido, aclarando que “no nos representan” y que la defensa del entorno debe ser siempre pacífica y respetuosa.
Unidad política y futuro incierto
La manifestación contó con la presencia de representantes de la gran mayoría de fuerzas políticas locales, lo que refuerza la legitimidad del movimiento ciudadano y abre la puerta a que se tomen medidas institucionales para frenar el proyecto.
La plataforma ha asegurado que la movilización “no termina aquí” y que seguirá trabajando para lograr la paralización definitiva de Oroel Park, al que consideran incompatible con la conservación de un espacio natural protegido de alto valor ambiental y simbólico.