La 23ª edición de Os Foratos del pasado fin de semana fue espléndida. De su reputación tras tantos años, ya hablaba el hecho de agotar dorsales tiempo antes de la salida. Los privilegiados que lo consiguieron se encontraron, además, con un cielo azul y un sol radiante que permitieron admirar a lo grande los espectaculares parajes por donde discurren las tres pruebas. Unos recorridos que se caracterizan por su riqueza paisajística, histórica y cultural. Los participantes tuvieron el privilegio de correr y caminar por senderos, pistas forestales, collados y cascadas… rodeados de la vegetación característica de esta región, vigilados desde lo alto por sus hermosas y altas cumbres.
Abrió fuego la prueba reina el sábado, una Ultra Tendeñera 50k, mientras que el domingo llegaron sus dos hermanas menores, más cortas y explosivas: los 25 Km. Vuelta al Cebollar y los amables 13 Km de la Ruta Os Foratos.
La Ultra Tendeñera 50k arrancó a las 6.00 con 200 corredores desde el corazón de Torla-Ordesa, y un gran ambiente. Por delante, 50 kilómetros de recorrido extremo y variado, con puro ambiente alpino y un desnivel muy exigente de D+4100m. El primero en cruzar la línea de meta, tras 7 horas y 18 minutos, fue Chano Calvo, seguido por Dani Izquierdo y Erlantz Zaldunbide, segundo y tercero, en 7h30m y 7h33m, respectivamente. En cuanto a las chicas, la primera en atravesar la meta fue María Irigoyen en 9h07m y tras ella lo harían Mireia López, en 9h18m y Nuria Mendivi en 10h08m.
Los 25km de la Vuelta al Cebollar fueron para Ana Tauste, Ainhoa Elizondo y Ana Bas en lo femenino, mientras la clasificación masculina fue liderada por Alberto García, el veterano campeón de Europa Raúl García Castán y David Dominguez.
Los 13km de la Ruta Os Foratos cerraron el evento con la victoria para Fernando Esperanza y Marina Aibesa. El podio masculino lo completaron Miguel Viñuales y Markel Barrio, mientras el femenino tuvo a Andrea Castán y Patricia López en la plata y bronce, respectivamente.
