La montaña ha estado cosida al misterio. Las cumbres siempre han estado allí y fue el hombre quien accedió a ella. Más concretamente a sus valles. La montaña permanecía sumergida en secretos. El miedo se apoderaba de las gentes y pocos se atrevían a adentrarse en ellas. Personas desaparecidas, animales fabulosos, seres mitológicos. Leyendas e historias. Pasos secretos y zonas ocultas. Personas que se adentraban en montañas y valles… y desaparecían.
Los montañeses han vivido muchas veces con recelo a la montaña. Zona hostil y bella, territorio de pastores, primero, contrabandistas, después, que, quizá, azuzaban las historias y leyendas para tener los pasos más francos y protegidos a la vista de vecinos y, claro, de la autoridad.
El romanticismo fue una de las principales causas de que la montaña se hiciera más cercana. Rompió con las ideas de la ilustración y el neoclasicimo, destacó a través de la música, el arte y la literatura la emoción que despiertan los espacios agrestes, la naturaleza y la melancolía.
Y la montaña siempre ha estado rodeada de misterios y de miedos. En Expediente Montaña, la nueva sección de misterio del podcast Planeta Montaña, queremos acercarnos a esa montaña misteriosa, que no siempre será sinónimo de miedo. También hay historias idílicas como Shangri La, ese paraíso utópico descrito en la novela Horizontes Perdidos del británico James Hilton en que las personas que viven en Shangri La son casi inmortales, viven cientos de años más que el resto de los seres humanos y envejecen muy lentamente.
En Planeta Montaña, Sebas Álvaro nos dejó algunas pinceladas de uno de los misterios que más inquieta al mundo de la escalada como es si fue George Mallory el primero en subir al Everest en 1924, 29 años antes de que el sherpa Tenzing Norway y Edmunt Hillary pasaran a la historia como las primeras personas que subieran a la montaña más alta de la Tierra.
Entre los Alpes de Bertesgaden, en la frontera entre Alemania y Austria, se encuentra la montaña Untersberg donde la leyenda cuenta que hay personas que perdieron la conciencia y aparecieron en un punto distinto al que recordaban estar con anterioridad.
Y si Sebas Álvaro nos dejó pinceladas sobre el misterio de esa primera ascensión al Everest, Aitor Tilla, por su Nick en tuiter, nos trajo el Paso Diatlov. Hoy abrimos Expediente Montaña con ese misterio que sigue sin resolverse.