HUESCA | Gonzalo Melero se llevó una de las ovaciones más bonitas que ha otorgado El Alcoraz a un futbolista. El jugador fue homenajeado por ser uno de los futbolistas claves en su historia antes del empate a dos entre los altoaragoneses y el Almería. Agustín Lasaosa le dedicó un `escuchete´ y le entregó un cartel conmemorativo y el futbolista recibió los aplausos de cada uno de los 5.223 asistentes. El centrocampista de 30 años saludó a todo el campo en presencia de su mujer y de sus hijos que vieron como es de querido este futbolista en Huesca.
Melero hizo historia en el Huesca. Jugó 102 partidos como azulgrana, llegando a ser capitán del equipo. Marcó 25 goles, 16 de ellos con Rubi (el otro ovacionado de la tarde) en la temporada del ascenso a Primera División. En su despedida, el 4 de julio del 2019, dijo: “Gracias porque me habéis hecho sentir como en casa. Por haber sentido sobre el campo sensaciones inexplicables. Porque es imposible estar más agradecido. Porque desde hoy, soy un aficionado más”, relataba el día que anunciaba su ficha por el Levante a cambio de 3.600.000 euros.
Melero tiene contrato hasta el 2026
El medio madrileño tiene todavía contrato con el Almería hasta junio del 2026. El futbolista quedaría libre con 32 años y ese podría ser el momento propicio para volver al campo en el que más feliz ha sido. En estos momentos parece ser un futbolista fundamental dentro de los planes de Rubi para el Almería y con el equipo andaluz en Segunda, lo normal es que cumpla su contrato. Melero se fue con la espinita de haber vivido la temporada de su despedida con una pubalgia que no le dejó ayudar a su equipo en su lucha por la permanencia en Primera División. Todavía está lejos su final de contrato, pero lo vivido en El Alcoraz este domingo no lo olvidará ni Melero ni nadie de su familia.