Claro y conciso se mostraba Dragan Sakota después de la hecatombe que ha sido la derrota de Casademont Zaragoza ante Morabanc Andorra (80-83). “La esperanza se está muriendo”, han sido sus palabras. Y no es para menos, ya que ahora toca ganar el sábado en la pista de UCAM Murcia, cosa que “no es fácil”. En cualquier caso, avisa: “No me voy a rendir“.
El técnico balcánico reconoce que ha sido un choque “muy duro”, donde hasta en dos ocasiones tiraron “la oportunidad de ganar el partido”. Ha lamentado también los 13 tiros libres desperdiciados (17/30), por lo que concluye apuntando que “hemos elegido el camino más difícil para salvarnos”.
La ausencia de Jordan Bone
Respecto a la ausencia de Jordan Bone, sin minutos este martes, apunta a que se debe a una “decisión técnica”. Lo ha justificado aludiendo a sus “últimos cinco o seis partidos por debajo de las expectativas”. “Intenté recuperarlo, pero fue algo imposible“, critica.