El trabajo de Adrián Mallén, entrenador de porteros en la SD Huesca, está siendo impresionante y Miguel San Román es muy consciente de ello. Quizá esa haya sido una de las principales razones de su llegada, al conocer muy bien personalmente a Mallén y al tratarse de un club con aspiraciones altas. Es el lugar perfecto para «seguir el camino de Sergio Herrera, Remiro o Álvaro Fernández».
«Miguel es el mejor ejemplo de la estrategia que hemos llevado a cabo durante las últimas temporadas de alternar veteranía y juventud en la portería. Es un portero con una proyección impresionante y tiene aquí la oportunidad de asentarse en la categoría y crecer hasta ser ese portero de élite que creo que va a ser», comenzaba Rubén García en su presentación.
El guardameta también se ha mostrado muy orgulloso por esta operación: «Sé que fui objetivo primordial para el Huesca y cuando un equipo te demuestra tanto interés, hay muy poco que pensar; más aún cuando se trata de un club con un proyecto ambicioso, asentado en Segunda y que lucha cada temporada por volver a Primera, la decisión fue fácil».
Si ayer Andrés Fernández hablaba de familia, hoy su máximo competidor no ha sido menos. Ha reconocido que ha sido «la adaptación más fácil que he tenido en toda ‘mi’ carrera». «Siempre me fijo en otros jugadores que también han llegado este verano, Marca Mateu, Salvador… y les veo como si llevaran varios años aquí. Este ambiente es fundamental para poder lograr un objetivo tan complejo como es el ascenso», añadía.
San Román llega a una SD Huesca que no solamente está unida, sino que también está rodada sobre el terreno de juego: «Me sorprendió muchísimo lo bien que ha interiorizado el equipo el juego del míster, una filosofía que me encanta ya que a mí también me gusta ser partícipe en la salida del balón. Los primeros 40 minutos del equipo contra el Éibar me encantaron, estamos en el buen camino y debemos seguir trabajando».
En cuanto a la lucha por la titularidad bajo palos, el valenciano lo tiene claro. «Siempre trato de dar lo máximo para el equipo, ya sea titular o suplente. Voy a pelearle titularidad a Andrés todos los días y creo que él mismo lo va a agradecer. Ya lo viví en Elche y creó que demostré que, pese a no tener continuidad, rendía a un buen nivel. Espero conseguir esa regularidad aquí».
San Román desprende confianza y una actitud peculiar. Se nota que ha analizado al Huesca. De hecho, ha destacado un episodio que fue «bonito» para él como fue el primer descenso a Segunda. «Ver cómo todo El Alcoraz ovacionaba a sus jugadores y reconocía su esfuerzo, es algo bonito de ver y dice mucho de cómo son», indicaba.
