Real Zaragoza y SD Eibar se dan cita en la sesión golfa de la jornada, a las 21 horas de este lunes. Los armeros, que llegan en buena racha al encuentro, quieren saborear lo que es una victoria lejos de Ipurúa, donde se han hecho fuertes.
El conjunto dirigido por Garitano practica un fútbol divertido, atrevido y vertical. El Eibar es uno de esos equipos que se salen de la red mayor de equipos de Segunda división que llevan a cabo el conocido como «el otro fútbol». Más encerrados, con menos espacios y menos toque del balón.
A pesar de no haber vencido lejos de casa, los armeros han comenzado bien la liga y han hecho de su estadio un fortín que, ya de por sí, suele ser complicado. Pero les toca venir a La Romareda, a visitar a un león herido, siempre peligroso y con ganas de reponerse.
La SD Eibar cuenta en sus filas con jugadores de talla estelar, como Stoichkov, su máxima referencia, o futbolistas con varita mágica, llámese Aketxe, Matheus Pereira, o Javi Muñoz. Además, ha conformado una plantilla de garantías con delanteros como Bautista, o el tiburón Leschuk que ya estuvo el año pasado. Lo que significa, que el conjunto vasco ha logrado mantener un bloque, en su mayoría, peligroso.
Nunca ha sido fácil vencer al Eibar. Propone, llega y hace daño. Pero el Real Zaragoza debe saber contrarrestar sus prestaciones, necesitando una victoria ya para disipar las dudas originadas en Anduva (2-0). El equipo de Gaizka Garitano se ha repuesto con energía del golpe que sufrió el pasado año en Alcorcón, donde perdió el ascenso en el minuto 90.
Para ello, Garitano suele utilizar un 4-2-3-1, donde Aketxe y Corpas juegan un papel fundamental. El sistema no tendría sentido sin la presencia de Stoichkov, objeto de deseo de media primera división, y que ha decidido quedarse para lograr el ascenso con el Eibar.
Para frenar al equipo armero, Carcedo deberá ganar la partida a Garitano a través del balón, con espacios cerrados atrás y sobre todo, con mordiente arriba. Puede ser la primera titularidad de Azón junto a un Simeone brillante en este inicio.
