Después de lograr una victoria en 17 jornadas con la SD Huesca, fue el propio Míchel Sánchez el que se encargó de nombrar la palabra «destitución» en rueda de prensa: «Si estás buscando una respuesta sobre la posible destitución no es mi máxima preocupación». Por otro lado, una vez acabado el partido y a pie de campo, dejaba claro su «miedo por perder su puesto porque estoy enamorado de trabajar aquí».
Ahora será la dirección deportiva la que deba tomar una decisión en las próximas horas y habrá que ver si siguen dando la mano al técnico vallecano. «Hasta el día de hoy sí me han demostrado la confianza el club, mañana ya veremos», añadía.
La derrota ante el Barça no le hace hincar rodilla y es que sigue teniendo «la energía al 200%». «Veo al equipo competir y lo veo vivo. Ningún aficionado puede hablar mal de ningún jugador. Se dejan la vida. El equipo compite muy bien. Busco soluciones y creo que las tengo pero como no depende de mí tampoco me fijo demasiado en eso. Los malos resultados no me quitan la energía», apostillaba.
Renuncia a su filosofía
El Huesca sucumbió ante un FC Barcelona al que le bastó con hacer un buen primer tiempo para llevarse los tres puntos, por primera vez en esta competición, de El Alcoraz. El técnico azulgrana ha reconocido que su equipo no ha sido el mismo en la segunda parte. Dentro de la idea de juego oscense, «sabíamos que no podíamos ser nosotros mismos porque el Barcelona nos iba a quitar la posesión del balón». Y así fue.
Por esa razón, el vallecano planteó «defender espacios con tres centrales, que Sergio defendiera las incorporaciones de Jordi Alba y que tuviéramos progresión con Rafa y Ontiveros. Con tres centrocampistas con mucho trabajo. En la primera parte hemos cumplido al 50%, nos ha faltado salir con más determinación o con menos timidez».
En caliente, la solución de Míchel pasa por ser «más contundentes y a pesar de la derrota piensa que la SD Huesca «tiene capacidad de seguir en la primera división a final de temporada». Okazaki, Ferreiro, Juan Carlos y Doumbia saltaron al campo para cambiar la cara de los altoaragoneses. «Nos dieron un plus, igual que el otro día», asentía.
¿Petición para el mercado de fichajes?
Con el mercado de fichajes ya abierto, el técnico ha confirmado que no ha pedido «nada» ya que «la plantilla es suficiente para conseguir el objetivo». De la misma manera, ha dejado caer que «si viene algún jugador en medio es porque sale alguien y viendo la composición de la plantilla quizá algún extremo. Quizá esa es una escasez de la plantilla».
Las últimas palabras de Míchel -quién sabe si sus últimas en una rueda de prensa post partido- reconocían el peso de los resultados en el fútbol. Sin embargo, cree en ellos «a largo plazo y creo que a la larga se verá recompensado el trabajo que hace el Huesca y el que hago yo. Es lo que siento y me siento tranquilo. Aunque sea un examen cada día es parte del fútbol y lo asumo con naturalidad».
