HUESCA | La selección española de balonmano tiene un sábado intenso en Huesca antes de que el domingo, en el Palacio de los Deportes, más de 4.000 aficionados empujen para ganar a Letonia, firmar el liderato del grupo y enfilar el europeo con el objetivo de ser la primera del grupo. El billete lo consiguió ante Italia (29-33). Este sábado, la tropa de Ribera tiene acto protocolario por la mañana en el Ayuntamiento de Huesca y, por la tarde, los jugadores firmarán autógrafos en el Palacio a partir de las 18:30.
La selección llega con dos jugadores que tienen pasado altoaragonés: Rodrigo Corrales y Agustín Casado. El portero dejó su sello en el equipo que le aupó de forma directa al profesionalismo; el central no terminó de amoldarse a la ciudad y la afición se quedó sin ver el enorme potencial andaluz que le ha llevado a la selección. El domingo se podrá resarcir.
El combinado nacional ya se encuentra en la capital altoaragonesa. José Francisco Nolasco, técnico del Bada Huesca, cuando se le pregunta por lo que espera ver el domingo lo primero que se fija es en la respuesta de la afición, de esas más de 4.000 personas que acudirán al Palacio de los Deportes. “Significa -acota- que a Huesca no solo le gusta el deporte, también que hemos generado una afición al balonmano, que sabe de qué va esto. No es fácil meter a tanta gente y creo que es algo más a anotar en los hechos históricos conseguidos por el Balonmano Huesca”.
Deportivamente espera “ver un partido competido” contra Letonia y comprobar cómo han evolucionado jugadores que han estado aquí. “Está claro que han ido a más porque están en la selección, los sigo, pero me gustará verlos en directo”, precisa. Y con ellos, a jugadores que fueron rivales en la ASOBAL y que están en equipos con enorme potencial económico en otras ligas y otros que están en la liga española y ver su comportamiento en la selección.