Gabi Torralba, en la imagen, en la prueba de Copa del Mundo donde ha logrado la mejor clasificación hasta la fecha. Foto: Cedida
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HUESCA | Gabi Torralba va camino de los Dolomitas y, por fin, con una sonrisa en una temporada especialmente dura. No es para menos. Incluso llegó a plantearse si seguir o no. Ser competitivo, creer en sí mismo y la confianza de su gente más cercana le hizo seguir. Hoy, saborea la séptima posición en la Copa del Mundo e-bike disputada en el Pirineo francés el pasado fin de semana. En concreto, en Loudenvielle-Peyragudes. Con anterioridad se había acercado al Top-10, un 13º y un 14º puesto como mejores resultados. Y claro, una séptima plaza le ha dado una confianza tremenda.
Por eso, su mente está en las Dolomitas, próxima parada este fin de semana de la Copa del Mundo. Y el objetivo es cerrar su participación entre los diez primeros. «Sería algo épico», subraya Gabi Torralba. Es la última prueba del campeonato y quizá de su calendario. En el aire, su participación en la Trans-Nomad. El ‘biker’ de Riglos se enfrenta esta semana a montañas con bajadas muy largas, terreno más rocoso que el del Pirineo y cierta seguridad de que habrá agua, barro y frío. De esto viene vacunado tras el pasado fin de semana donde el agua cayó en la cara norte de la cordillera a pozales.
Para encapsular mejor lo que acaba de firmar Gabi Torralba hay que echar la vista atrás. La temporada está siendo muy dura. El hombro izquierdo le ha jugado malas pasadas. La lesión persiste y cuando uno es ‘pro’ las sensaciones son importantes, tenerlo todo controlado es clave. Y si el hombro en cuestión te juega a la contra y los problemas mecánicos aparecen, todo es más complicado. Todo se pone cuesta arriba. Todo te lleva a pensar si merece la pena seguir o no. «Junio y julio fueron dos meses complicados, hasta me llegué a plantear si merecía la pena todo», asevera.
Y ese séptimo puesto en el Pirineo fue la contestación a la duda. Y la dedicatoria, cómo no, para sus padres -Juan y Monse- y para su pareja, Haizea. Ella también compite y, sin duda, ha sido y es un apoyo tremendo para el ‘biker’ altoaragonés. De hecho comparten entrenamientos. Y seguro que ha contribuido a que el ‘biker’ de Riglos piense en positivo. Dolomitas espera.
