Sergi Enrich ha dicho basta. El delantero balear de la SD Huesca expresó este lunes, visiblemente afectado, su malestar tras la derrota ante el Albacete en un final de partido caótico que dejó al equipo aragonés fuera de los puestos de playoff. Más allá del resultado, Enrich puso el foco en la gestión arbitral de los minutos finales, que calificó directamente de “inexplicable”.
Un dolor que va más allá del resultado
Enrich comenzó reconociendo la frustración del vestuario: “Estamos jodidos. Muy jodidos. Porque creemos que hicimos muchas cosas bien. Fue un gran partido, una oportunidad de oro para engancharnos al playoff”.
El enfado del delantero se centra en la gestión del descuento: “Nos empatan en el 97, y después el árbitro añade más minutos sin sentido. Es algo que no entendemos. Si marcan el gol del empate, pita el final. ¿Por qué seguir jugando? ¿Qué más tenía que pasar?”.
“No buscamos excusas, pero necesitamos respeto”
A pesar de su malestar, Enrich fue claro: “No quiero decir que el Huesca no vaya a jugar el playoff porque los árbitros nos han perjudicado, no es eso. Pero lo del otro día fue inexplicable”.
Más allá del enfado puntual, el delantero reflexionó con calma sobre la situación general: “He jugado en equipos de ciudades más grandes, con más masa social, y estoy convencido de que allí esto no pasa. Si pasa, hay consecuencias. Solo pedimos respeto. Para el Huesca, para nuestra afición y por el trabajo que estamos haciendo”.
Un mensaje con autocrítica y sentido común
Enrich también habló de la dificultad de dialogar con los árbitros: “No puedes hablar con ellos. A mí me sacan tarjeta porque protesto, pero lo hago con respeto. Solo quiero que me expliquen. Me miran con soberbia. ¿Cómo quieres que reaccione cuando estábamos a mil pulsaciones?”.
No faltó la autocrítica: “Si me equivoco en el campo, el míster no me pone el siguiente partido. Lo acepto. Pero cuando un árbitro se equivoca, al menos que lo reconozca, que diga ‘me he equivocado’, como hacemos los demás en la vida”.
El Huesca se aferra a su última oportunidad
Aunque la derrota ante el Albacete complica mucho el camino hacia el playoff, Sergi Enrich dejó claro que el equipo no se va a rendir: “Quedan tres puntos en juego. Vamos a por ellos. No sabemos si nos bastará, pero lucharemos hasta el final”.
Concluyó su intervención con una declaración sincera: “Llevo días jodido, pero tenía que decirlo. Así es como nos sentimos”.