La SD Huesca abrirá la jornada en Segunda División con un exigente desplazamiento a uno de los estadios más imponentes de la categoría: Riazor, donde se medirá este viernes al Deportivo de La Coruña. En la previa del choque, el entrenador azulgrana, Sergi Guilló, compareció ante los medios para analizar tanto el estado de su plantilla como las claves del duelo ante un rival que llega en un gran momento de forma.
La plantilla, casi al completo y con buenas sensaciones
Guilló comenzó la rueda de prensa trasladando tranquilidad en cuanto a la situación física de sus jugadores. “No hay sorpresas. Recuperamos a Dani y Jesús está en condiciones óptimas para competir”, afirmó. El entrenador también se refirió a Albarracín, uno de los fichajes más ilusionantes del verano: “Está más cerca de su mejor versión. Aún le cuesta repetir esfuerzos, pero ya muestra lo que nos convenció para ficharle”.
🔵🔴 No te pierdas el programa de Balones Fuera analizando el Huesca (1-0) Málaga
Reto mayúsculo en un escenario de grandes noches
El técnico no ocultó la dificultad del reto que tienen por delante: “El Deportivo es un equipo construido para luchar por el ascenso. Tiene pegada, ritmo y juega en casa, donde se hacen fuertes”. Sin embargo, Guilló no ve este escenario como una amenaza, sino como una oportunidad perfecta para reivindicarse: “Si pudiera elegir un campo para levantar la moral tras lo de Ceuta, elegiría este. Riazor es ideal para volver a mostrar nuestra mejor cara”.
El Huesca crece, pero aún tiene margen de mejora
Sobre el rendimiento del equipo, el entrenador quiso rebajar la euforia tras el buen inicio de curso: “La clasificación ahora mismo es anecdótica. El balance real llegará cuando completemos la primera vuelta”. Pese a ello, valora el crecimiento que está mostrando el grupo: “El otro día contra el Málaga me fui más satisfecho que ante el Eibar. Fuimos dominadores durante muchos tramos, y eso habla del progreso”.
Guilló insistió en que aún queda mucho por ajustar: “Somos un equipo en construcción. Hay muchas caras nuevas, cuerpo técnico nuevo, y cambios importantes en el estilo. Pero vamos por buen camino, dando pasos firmes”.
Guilló pide concentración, valentía y saber leer los momentos
El análisis del rival también incluyó una mención al planteamiento de Hidalgo, técnico del Deportivo: “Ha sabido adaptarse al perfil de sus jugadores. Vemos cosas que ya hacía antes, como la defensa de cinco o las salidas en corto con Soriano, pero ha introducido variantes interesantes”.
Respecto a la estrategia del Huesca para este partido, el mensaje fue claro: “Si vamos solo a aguantar, estamos perdidos. Tendremos nuestro momento en el partido, y hay que hacer daño cuando llegue”. Guilló remarcó la necesidad de leer bien cuándo presionar y cuándo juntarse: “A veces hemos pecado de separarnos demasiado, y eso nos penaliza. Hay que ajustar ese tipo de detalles”.
Competencia interna y descartes inevitables
Por último, el técnico reconoció que habrá descartes en la convocatoria, una situación habitual en plantillas amplias. “No es plato de buen gusto, pero es parte del proceso. Lo importante es que el que se quede fuera mantenga la actitud y esté listo para la siguiente semana”.
Con un discurso realista, pero cargado de ambición, Guilló dejó claro que su equipo no irá a Riazor de turismo: “Vamos a competir, a ser valientes, y a mostrar el carácter que nos ha traído hasta aquí”.