La primera ocasión en la que los oscenses jugaron en feudo vallecano fue en la temporada 2008/09. Míchel, el actual entrenador de los franjirrojos, fue protagonista en aquel encuentro, anotando el único gol del mismo (1-0) en el primer minuto de partido. Y las temporadas siguientes, el Huesca recibiría severos correctivos por parte del Rayo.
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En la 2009/10, el choque acabó con un 4-1 claro para los madrileños en un partido que ya pintaba muy mal a los 10 minutos de juego y es que, en el 7′, Rubén Castro ya había marcado 2 goles a su exequipo. El solitario gol azulgrana fue anotado por el mediocentro Víctor Pérez. En la siguiente campaña llegó una nueva goleada: los de Onésimo terminarían encajando un 4-0 aunque la superioridad vallecana no fue tan clara, puesto que 2 de los 4 goles llegaron en los últimos 10 minutos.
El último precedente tuvo lugar la pasada campaña. El partido terminó con un 2-2 que el Huesca luchó hasta el final. Los oscenses se adelantaron por medio de Borja Lázaro; Ebert anotaría dos goles dándole la vuelta al marcador y, sin embargo, el propio Borja Lázaro terminaría la faena que empezó y logró anotar su segundo gol de la tarde, que a la postre significó el único punto que ha sacado el conjunto altoaragonés de Vallecas.
Las tarjetas, de entrante
Por si la estadística no era suficiente aciaga para el Huesca, las tarjetas y las sanciones que acarrea son comunes en los encuentros que ha visitado al Rayo. 3 de los 4 enfrentamientos han acabado con 21 jugadores sobre el verde y se han mostrado un total de 21 tarjetas amarillas, una media de 5 por partido.
Corona y Brezancic, por doble amarilla, han sido los azulgranas expulsados en Vallecas, mientras que Aganzo es el único vallecano en los 4 encuentros que se ha marchado a vestuarios ante de tiempo. De las 21 amarillas, 12 fueron para jugadores del Huesca y, en la próxima ocasión, una amonestación para Gallar o Alexander, por ejemplo, ambos apercibidos, significaría que fuesen nuevas bajas para Rubi, añadiéndose a una lista ya de por sí amplia.